La familia formada por el joven matrimonio Israel Fernández y Carmen Fernández y sus tres hijos de 6, 10 y 14 años, fue desalojada hace dos días de la vivienda que llevaban ocupando un año en la Avenida de las Américas de Pedro Muñoz.
Así lo ha confirmado el padre, quien ha lamentado la triste situación que atraviesan en la actualidad, sobre todo la pareja: “mi mujer por un lado y yo por otro, y sin obtener soluciones”.
El desahucio se ejecutó este miércoles 12 de febrero en el segundo lanzamiento ordenado por un juzgado de Alcázar de San Juan, promovido por la Sociedad Inmobiliaria Desarrollos Las Peñicas S.L., propiedad de la vivienda, tras la paralización del primero el pasado 10 de enero.
Entonces, intervinieron miembros de la Plataforma de Afectados por la Hipoteca de Campo de Criptana (PAH) y otros activistas de las PAH de Tomelloso, Argamasilla de Alba y Miguelturra, que protestaron contra la decisión judicial.
El aplazamiento se produjo porque el juzgado accedió a valorar algunas peticiones presentadas por el abogado de la familia, Luis Javier de Vicente, como la posibilidad de que la sociedad propietaria de la vivienda hubiera accedido a ofrecer un alquiler social a los afectados, teniendo en cuenta que se trata de una familia “con tres hijos menores y no se les puede dejar en la calle”. También entregaron una evaluación profesional que informaba de la escolarización de los niños y del padecimiento de la madre.
Israel Fernández ha explicado que están “al límite”, sobre todo su mujer (sufre depresión), porque no encuentran casa alternativa, ni siquiera de alquiler en la población, pues “hemos buscado pero no hay”.
Tampoco el Ayuntamiento,según ha relatado a este digital, dispone de viviendas sociales, una vía explorada desde que se activó el desahucio a través de los Servicios Sociales, cerrada en negativo porque al parecer “no hay casas de emergencia en Pedro Muñoz”.
Por ahora, los niños viven con su abuela materna, “y yo estoy por ahí, y mi mujer igual”, porque “es una cosa muy grande para nuestra vida y para nuestro matrimonio”.
Ha recordado que ocuparon la casa tras contactar con unas personas “que nos engañaron”, ya que “les pagamos un alquiler durante seis meses (aunque la vivienda no fuera de su propiedad) y desaparecieron”.
La realidad es que la vivienda es de la Sociedad Inmobiliaria Desarrollos Las Peñicas S.L., una sociedad instrumental de Liberbank que “nuca ha aceptado que paguemos un alquiler social”.