El hombre detenido como presunto autor de violencia de género el pasado día 24 de diciembre ha querido defenderse y a través de un vídeo en las redes sociales ha ofrecido su versión de estos hechos afirmando que “solo quería ver a mis hijos un día 24 de diciembre, Nochebuena” y que, según explica, su expareja no se lo permitía “a pesar de que lo tengo por convenio, lo denuncié en la comisaría de Puertollano y dejo constancia”.
Según explica él mismo, el juzgado de Puertollano le ha puesto una orden de alejamiento de 200 metros de su expareja, “me da igual porque no me interesa su madre, como si me quieren poner un kilómetro, solo me interesan mis hijos”, así como no poder ver a sus hijos durante 30 días, esta última cuestión reconoce que le duele más, “no lo entiendo señora jueza, dentro de 30 días ya soy mejor padre”, se pregunta.
Así, narra a través de este vídeo que llegó de malas formas, “llegué cabreado, pegué un golpazo cuando me dijo que o me iba o llamaba a la policía, allí se presentaron pero les digo que yo estoy relajado con las manos en los bolsillos” afirma y continúa relatando “llegaron diez policías y me dicen que o me siento o me tiran al suelo, si yo estoy de buena actitud, me tiran al suelo y se me suben encima tres o cuatro, empezaron a aporrearme y he puesto una denuncia por todos los cardenales que tengo en el cuerpo”. Así, finaliza explicando que el solo es un padre que quiere ver a unos hijos.