Desde que abriera su tienda “Recuerdos de papel”, Inma Chacón ha dado muestras de su sobrado talento y profesionalidad. De ello dan fe unos clientes que siguen confiando en ella para inmortalizar los momentos más importantes de sus vidas. Mujer de ideas claras, emprendedora y, por encima de todo, innovadora, la fotógrafa analiza en esta entrevista las secuelas que dejará el Covid-19 en su sector y el conjunto de la economía.
Dice que ha llevado el confinamiento con altibajos. “Como le ha pasado a la mayoría de la gente, he tenido momentos de ansiedad, sobre todo en los primeros días, pero a medida que fueron pasando los días empecé a hacer ese tipo de casas que casi nunca nos da tiempo a hacer cuando estamos en plena vorágine laboral. Lo bueno ha sido pasar más tiempo con la familia, compartir muchos momentos con mi marido y mis hijos. También he aprovechado para adelantar el trabajo retrasado que he podido”.
Afortunamente, Inma no ha tenido pérdidas en su entorno familiar, pero es consciente del mucho dolor que ha provocado esta pandemia. “Para esas familias que han perdido gente tiene que haber sido muy doloroso, y mucho más en las circunstancias, de soledad y tristeza en que han despedido a los suyos”, señala.
La pandemia ha llegado en el peor momento posible para los fotógrafos. “El mes de marzo lo dedicamos a hacer los reportajes previos sobre las comuniones. Es un mes de mucho trabajo, algo estresante, a contrarreloj, pero que hacemos con mucha ilusión, disfrutando de lo que nos dicen y nos ofrecen los niños ante un momento tan importante. Y mayo es un mes de comuniones y también de muchas bodas que se han tenido que suspender”. Chacón no cree que, a medida que avance la desescalada, pueda cuajar un tipo de boda con menos invitados. “Aquí en Tomelloso la costumbre es de hacer bodas con mucha afluencia de invitados. Está claro que nuestro sector va a sufrir en un complicado”, asevera.
Y abundando en el tema de las bodas, la fotógrafa dice que “habrá un problema para encajar las fechas de bodas en el 2021. Este año ya había fijadas muchas y ahora hay que añadir las que se han suspendido en el 2020. Resulta muy complicado encontrar huecos”. Pero rápidamente vuelve a asomar su talante optimista y lanza este precioso mensaje. “La ilusión no tiene que perderse porque el amor no entiende de fechas. Hay que celebrarlo en familia y eso se va a hacer. Con la misma ilusión”.
“Nuestro oficio, -continua diciendo-, va muy ligado al de la hostelería. Y si ellos no pueden abrir, evidentemente, nosotros tampoco podemos trabajar. ¿Buscar alternativas? Le he dado muchas vueltas, pero no resulta fácil. Ya me voy mentalizando que será un año duro, de poco trabajo, en el que aprovecharé para estudiar y reciclarme profesionalmente. Por suerte, tengo a mi marido que tiene su trabajo y tenemos el sustento asegurado”.
De momento no tiene previsto abrir su tienda, aunque sí de manera esporádica cuando reciba algún encargo. “Un local tiene gastos de alquiler, luz, seguros…y ahora es difícil hacer frente a todo eso”. Chacon tiene muy claro que “el miedo y la precaria situación económica en la que va a quedar mucha gente ralentizarán el consumo. Sobre todo en sectores como el nuestro, porque la gente tendrá prioridades más importantes que la de hacerse una fotografía”.
En cualquier caso una mujer tan inquieta como Inma Chacón, de las que nunca se rinden, siempre busca hacer nuevas cosas y trazarse metas. “Me plantee junto a Yolanda, una profesional del maquillaje, hacer unos directos para ver como se viven los momentos previos de la boda. Ella y yo coincidimos que todos los profesionales que intervenimos en una boda deberíamos coordinarnos mucho mejor para que los novios la disfruten , que los tiempos estén bien calculados y no se produzcan esos terribles nervios. Hicimos los directos y creo que han quedado bastante bien”.
Además, Inma tiene depositadas muchas ilusiones en otro proyecto. “Es un documental que va a ser muy bonito y que estamos pendientes que nos lo aprueben en el Ayuntamiento. Viene de la mano de Ángel Rodríguez, un joven videógrafo cuyo talento va a dar que hablar. Me siento orgullosa y agradecida de ser parte de ese proyecto”.
Al final de esta entrevista le pido una reflexión sobre si lo sucedido provocará cambios en la manera de actuar y pensar de la gente. “La historia demuestra que el hombre comete siempre los mismos errores. Nuestra memoria es limitada y nos quedamos únicamente con lo que nos interesa. Quizá al principio la gente intentará cambiar, pero con el paso del tiempo se olvidarán las cosas”. A Inma Chacón le preocupa especialmente la influencia que pueda tener esta pandemia en los más jóvenes. “Nuestros hijos pueden salir más afectados sicológicamente de esto. Han vivido una situación muy anómala que les puede dejar cicatrices. Eso nos obliga a ayudar a estas nuevas generaciones que ha tenido la mala suerte de vivir este duro momento”.
