USO ha lamentado este sábado el fallecimiento de dos personas en el Centro de Atención Psicológica ‘Guadiana II’, de Ciudad Real, donde en la actualidad se contabilizan más de 25 afectados, según ha señalado el sindicato en un comunicado de prensa en el que ha recordado que hace una semana alertaban de la «gravísima» situación en la que se encontraba este centro de atención tras la aparición de los primeros contagiados positivos de COVID-19, por la falta tanto de equipos de protección individual (EPI) como de las medidas de prevención necesarias en aplicación de los nuevos decretos ley, han informado en un comunicado.
La situación, a día de hoy, han apuntado, «es que siguen sin EPI suficientes y los pocos que van quedando están rotos y deteriorados» por lo que ha alertado que «los trabajadores están expuestos permanentemente a un riesgo gravísimo en sus puestos de trabajo, además de incrementar las posibilidades de trasmisión del virus, tanto entre trabajadores como entre los propios residentes».
USO ha recordado que hace una semana enviaron una comunicación solicitando a la dirección del centro la implementación de medidas de prevención «más estrictas y efectivas», pero no ha recibido respuesta de ningún tipo, y ha añadido que la información por parte del departamento de gestión y dirección del centro a delegados y trabajadores sobre este problema y su evolución «es inexistente».
Pruebas diagnósticas
Ha añadido que las pruebas diagnósticas por parte de las autoridades sanitarias a residentes y trabajadores que «se han producido muchos días después de haberlas solicitado».
«Desde el sindicato USO, continuamos mostrando nuestra más absoluta disconformidad con todo lo que está ocurriendo y exigimos que se proporcionen los EPIs apropiados y necesarios a todos los trabajadores del centro de trabajo, así como la implementación de todas las medidas de prevención y seguridad que se han propuesto y solicitado por nuestra parte, así como, la aplicación estricta de los protocolos de actuación previstos por el gobierno para la atención, desinfección y control de este tipo de centros residenciales. Para ello, y en el caso de que no se haya hecho, exigimos también que se informe a las autoridades sanitarias en tiempo real de la grave situación, con objeto de que se proceda a la desinfección del mismo para intentar evitar futuras complicaciones más graves y fallecimientos en la medida de lo posible», reitera el comunicado.
Recomendaciones
Por último, lamentan que hayan sido desoídas e ignoradas todas sus recomendaciones y solicitudes desde el día 12 de marzo de 2020, fecha en la que en el centro hubo el primer contacto de una trabajadora con un positivo, y se inició este problema en el centro de trabajo.
«Lamentamos profundamente la actuación de la dirección del centro de trabajo, desmintiendo nuestra publicación anterior sobre lo que estaba ocurriendo y la catástrofe a la que se encaminaba el centro de trabajo, llegando a descalificar y atacar en medios de comunicación a nuestro representante regional de discapacidad y dependencia de CLM, Fernando de Haro Ferrero, acusándolo de mentir y alarmar sin motivo a las familias de los residentes», indican.
Por último, advierten que no les queda más alternativa que iniciar todas las acciones legales encaminadas a determinar las responsabilidades que puedan derivarse y deban determinarse, de todas estas acciones y todo lo ocurrido en el centro Guadiana II de Ciudad Real.
