Beatriz Molina de Gracia (Valdepeñas, 26/09/1992) es como un reloj biológico y tiene repartidas las horas y los minutos del día de manera escrupulosa. Cuando tiene que trabajar, trabaja. Cuando tiene que entrenar, entrena. Y cuando tiene que comer, para a comer, no sin antes pesar en la báscula la cantidad a digerir y mirar en su dieta lo que toca de menú con lupa. Hoy pesa 51 kilos, pero, dependiendo la época del año, puede subir o bajar algunos kilos.
Es lo que tiene ser una subcampeona del mundo de culturismo natural, un gran entorchado que logró hace menos de un mes y del cual se siente muy orgullosa. Porque a pesar de sus 28 años, Beatriz encontró su pasión tardía, hace apenas dos años, los que lleva compitiendo y preparando con la mirada puesta en el futuro y sin una fecha de caducidad.
Reconoce que es intolerante a la lactosa y que no le gusta el aceite de oliva, pero es tan necesario en su dieta que por las mañanas se lo toma a cucharadas, tapándose la nariz, como si de un jarabe se tratara.
Junto a Mario, su pareja, regenta la Churrería Real en Valdepeñas. En Villahermosa, por tradición familiar, también echa una mano en la churrería de la localidad. Pese a la pandemia, los churros siguen de moda hasta convertirse en algo esencial. Porque es cierto que entre el chocolate calentito y los churros, la situación es mucho más llevadera.
| CURRÍCULUM DEPORTIVO DE BEATRIZ MOLINA |
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| – Copa 2019 Copa AECN- Subcampeona de España (Ahí convocada para Campeonato Europeo en Manchester) – Tercera clasificada en el Europeo de Manchester (2019) – Subcampeona de España de culturismo natural (2020) – Subcampeona del Mundo de culturismo natural (2020) |
¿Cuánto tiempo llevas dedicándote a esto?
Llevo entrenando en el gimnasio desde los 20 años y en mi casa. Tengo un hermano que le gusta el gimnasio y me dijo que fuera con él. Fui un día con él y me encantó. Como él sabía, me iba enseñando. La primera semana fue dura, de dolores, agujetas…pero me gustaba. Con él siempre en el gimnasio. Él compitió y me entró el gusanillo (en la categoría men physique). Yo quería competir, me daba envidia, pero tenía que tener un preparador o entrenador personal y lo veía muy lejano. Mientras, trabajaba en lo que iba pudiendo y con eso pagaba el gimnasio. Luego empecé con mi pareja y con los churros (sus padres eran churreros). Cuando me vi con dinero, me puse en manos de un preparador. Primero, con uno de Ciudad Real, no me fue bien y lo dejé. Luego busqué otro y funcionó, porque entrenaba bien y me alimentaba mejor (Alberto Piedra, de Málaga). No puedo estar más contenta con él. La alimentación influye en el humor.
Explícanos con tus palabras en qué consiste esta modalidad.
Es un culturismo natural, sin química ninguna, de volumen, definición, para quedarse un cuerpo tonificado. No se trata de hacer pesas sin conocimiento y echar músculo sin control. De hecho, si vas muy musculada, te pueden penalizar porque eso corresponde a otra categoría. La definición, la masa muscular y la estética es la mezcla perfecta que hay que saber combinar.
¿Se considera un deporte?
Claro que es un deporte. Yo lo considero así porque haces cardio, fuerza, definición… Son muchas horas de entrenamiento, muchas horas de gimnasio y muchos músculos que estimular.
¿Qué es más duro en esta disciplina, lo mental o lo físico?
Una cosa va con la otra. Al trabajar duro, te cansas físicamente y terminas con dolores y agujetas. Algo normal. Pero antes, durante y después de lo físico, viene lo mental. Hay días que tienes tus bajones y no te apetece entrenar o no comer bien, pero ya estoy habituada mentalmente.
Como cualquier otro deporte, ¿hay que dedicarle mucho tiempo?
Entreno dos horas al día, cinco horas a la semana y hay que comer cuando lo diga el reloj, aunque si el cuerpo te lo pide… Sobre todo, el descanso es muy importante. Duermo ocho horas diarias y trato de controlar el tiempo de todo hasta hacerlo una rutina. Como la cambie, se nota muchísimo.
¿Es muy sacrificado?
Si te gusta, no es sacrificado porque lo haces a gusto. Tienes tanta motivación que es una ilusión, son ganas, es gusto… Quizá sea un estilo de vida porque muchas cosas no las puedes hacer, como cenar una hamburguesa con los amigos. Si vas a cualquier lado, tienes que llevarte el táper. Choca mucho quedar con alguien y sacar tu táper. Al principio pasaba hambre, pero ya veo raro comer otra cosa que no esté en mi alimentación. Hay veces que tengo ansiedad por el dulce, pero salimos adelante con algunas trampas.
¿Cómo es tu día a día?
Me levanto a las 7 y me hago un buen desayuno. Trabajo de 8 hasta las 13 horas, más o menos. A mitad de mañana, hago mi almuerzo. A mediodía, salgo de trabajar, como y me voy al gimnasio. Siempre tengo que comer antes del gimnasio, porque si no, no aguanto. Hago dos horas en el gimnasio. Luego, ducha, meriendo y vuelta al trabajo, de 17 a 20 o 21 horas. Por último, ceno, preparo las comidas del día siguiente (todo al vapor y pesado), veo un poco la televisión y me acuesto sobre las 22:30 o las 23 horas.
Mujer, trabajadora y deportista. ¿Cómo llevas esa mezcla?
Intento llevarlo todo lo mejor posible. Cuando estoy en mi trabajo, estoy en mi trabajo, y cuando estoy entrenando, estoy entrenando. Ahora me siento con energía y llego bien a todo, pero cuando estoy en la cuenta atrás de la competición, lo paso mal por los nervios, la ansiedad, la alimentación tan estricta, la hidratación…
¿Entran los churros en tu dieta?
No. Lamentablemente, no. Tengo un día libre de dieta, pero no me apetecen los churros, pero sí el dulce. Yo los preparo con mucho cariño ¡y se los recomiendo a todo el mundo!
Después de este gran año, ¿qué objetivos te marcas para el futuro?
Ahora mismo quiero prepararme de otra manera y volver a la competición en dos años. Me gustaría competir junto a mi hermano y probar en otras federaciones donde hay más nivel y participa más gente. Así es que, parón de competición, a seguir entrenando y ya veremos cuándo volvemos a competir.
¿Has pensado en cambiar de categoría o modalidad?
Lo pensé. Pensé en ir a la ‘musculada’, al culturismo de toda la vida, pero sería un cambio muy brusco en mi cuerpo y me pondría enorme. Me llama la atención, pero personalmente me gusta la disciplina en la que estoy porque la veo más femenina y más natural.
Hablando de la igualdad de género, ¿cómo está vista la mujer en este deporte?
Hay gente que tiene estereotipos y lo ve como un deporte de hombres, pero la mía, al ser una categoría tan finita, es más femenina. En el culturismo hay más participación de hombres, pero creo que tienen cabida hombres y mujeres.
Y hablando de apoyos institucionales, ¿te ves arropada por organismos, instituciones o federaciones o no te lo tomas tan profesionalmente como para vivir de esto?
En la federación que estoy no hay ningún tipo de subvención, pero yo nunca he recibido ayudas de nadie. Llegar ahí es satisfacción de uno mismo. Yo me compro todo y me pago todo. Como anécdota, he de decir que me regalaron un bikini al subir a redes sociales un bikini de una marca en concreta.
¿Te sientes modelo o deportista?
Hay chicas que te enseñan a hacer poses pero yo, sin tiempo para aprender a desfilar, he visto tutoriales y he ido aprendiendo poco a poco. Sinceramente, me siento más deportista que modelo. Quiero demostrar en el escenario mi trabajo, todo lo que he trabajado ese año hasta llegar ahí.
¿Hobby o pasión?
Las dos cosas. Hobby y pasión. Sinceramente, me apasiona el entrenamiento diario.
¿Tiene fecha de caducidad este hobby o pasión?
Mientras pueda, voy a seguir haciendo ejercicio y yendo al gimnasio. Llevo desde los 20 años y no se me pasa por la cabeza dejarlo. Es mi estilo de vida y es salud. El cuerpo tiene que estar activo, hay que moverse, hacer deporte y así, envejecer después.
| BIKINI FITNESS, LA CATEGORÍA DE BEATRIZ MOLINA |
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| La valdepeñera Beatriz Molina, dentro de la AECN, compite en la categoría ‘Bikini Fitness’ talla alta, es decir, chicas de 1,63 metros de estatura en adelante. Curiosamente, el reglamento de esta categoría dice que en la presencia en el escenario “se llevará bikini donde estará permitida la pedrería, cristales, brillos, etc…La parte trasera de la braga será de corte brasileño y nunca en forma de tanga. Como accesorios, se permiten pendientes, pulseras, coronas o diademas, pero nunca collares ni gargantillas. Se usarán zapatos o sandalias de la altura deseada, pero nunca llevarán más de 2 cm de plataforma delantera. El tinte será elegido por la atleta, siempre que sea un tinte que no manche mucho. Se recomienda tipo TOP TAN, PRO TAN…pero no se obliga a una marca en concreto”. En cuanto a las poses, en pre competición, “saldrán en orden todas las competidoras de cada categoría, realizando un breve paseo en forma de ‘T’ como coreografía de presentación. Una vez realizada, se irán situando en línea de frente a los jueces para poder ser comparadas. A continuación, se realizarán las poses de los cuatro perfiles. Tomando como referencia a los jueces y en este orden, de frente con la mano derecha sobre la cadera, perfil izquierdo con la mano derecha sobre la cadera, de espaldas con la mano derecha sobre la cadera, perfil derecho con la mano izquierda sobre la cadera y de nuevo de frente a los jueces. A instancias de los jueces, y para resolver posibles empates, podrán realizarse diferentes comparativas entre 2, 3 o 4 competidoras. En este caso, y en deferencia al esfuerzo de las competidoras que vayan a quedar fuera de la final, se realizará al menos una comparativa para todas las competidoras”. Ya en la fase final, “se clasifican sólo las seis primeras de cada categoría, aunque en caso de ser en total siete, pasarán las siete. Saldrán en orden todas las finalistas de cada categoría, que se situarán en línea de frente a los jueces. Una vez presentadas las finalistas, se realizarán las poses obligatorias y seguidamente comenzará un minuto de ‘posedown’ en el que las competidoras realizarán las poses que libremente deseen”. |
