En los tiempos que corren no es raro encontrarse inscrito en una base de datos de morosidad. Incluso sin que uno lo sepa, ya que nos pueden incluir por cualquier motivo, incluso infundado, como un recibo devuelto por error o un retraso en cualquier pago por simple despiste, y el dato puede haber sido facilitado bien por nuestro propio banco o por la empresa a la que le quedamos a deber dicha cantidad. Lo de menos es que sea a propósito o por error.
Esto significa que estar incluído en este fichero de morosos nos puede perjudicar de una forma muy grave porque, independientemente de que seamos un particular o una entidad jurídica, conseguir préstamos, aplazamientos de pagos, cambios de titularidad o algo tan sencillo como solicitar un contrato de un teléfono móvil con ASNEF se nos hará más complicado de lo habitual, aunque no es imposible.
Lo habitual es que, cuando estemos en una de estas listas, ésta sea la de la Asociación Nacional de Establecimientos Financieros de Crédito, más conocida por sus siglas como ASNEF, es una de las listas de morosos más conocidas en España.
El caso es que muchas personas aseguran que no están en el asnef, como puede sucedernos a nosotros, pero en realidad sí lo estaban y no lo sabían. Pese ello es verdad que cuando una empresa sube a alguien al asnef, normalmente le avisa con 30 días de antelación.
Pero, ¿cómo saber si estoy incluído en esta lista?
No hay duda de que si dejamos algo a deber podemos estar en ella. A veces podemos pensar que la deuda no era muy grande y que por 20 o 30 euros no nos van a incluir en el asnef. No es así. Existen empresas y administraciones que, por propia filosofía de empresa le pueden incluir a un deudor por un solo euro. Por eso es conveniente estar siempre alerta con nuestro banco y asegurarnos de que no devuelve ningún recibo.
Lo primero que tenemos que hacer para saber si estamos dentro de la lista es acceder a ella, lo que por otra parte no es difícil, puesto que todos los ciudadanos tenemos derecho a poder hacerlo.
El primer paso que debemos dar, y el más sencillo, es acercarnos a nuestro propio banco y hablando con la persona encargada de préstamos, nos dirá si tenemos derecho o no un crédito. Automáticamente el averiguará si estamos en la lista o no y nos avisará.
Pero puede ocurrir que nosotros lo sospechemos y queramos mantener al banco al margen. En ese caso basta con que acudamos a algunas de las páginas webs que tienen de forma pública este tipo listas, que te dan la opción de saber por medio de tus datos personales si estás en la lista de morosos o no, de forma totalmente gratuita. Solamente tendrás que poner tus datos personales, así como teléfonos y dirección y después tienes que llamar a un número de teléfono – gratuito- para verificar que realmente eres tú. Una vez confirmado, recibirás por medio de un email o en una carta en tu domicilio, los datos que has solicitado.
Otra forma de ver si estás incluído en el asnef, es ir directamente a empresas especializadas en este tipo de gestiones, o de concesión de créditos, que además de informarnos nos prestarán toda clase de ayudas.
Y finalmente un consejo: si descubrimos que nos encontramos incluídos en dichas listas, no nos preocupemos. Son millones de personas las que están allí, y no siempre por ser malos pagadores, sino por causas ajenas a ellos mismos. Lo que debemos hacer es intentar salir abonando la deuda y asegurándonos que realmente se nos elimina de la lista, quedando completamente limpios. Estos trámites son a veces un poco enojosos y complejos, por lo que en caso de duda se recomienda acudir a empresas especializadas que nos lo resolverán muy pronto y con apenas gastos.