Narrar sus experiencias, enriquecese y crear redes sociales de personas en situación de pobreza centran el VI Encuentro Estatal de Participación que celebran en la capital cerca de 200 personas.
Y es que las crisis socioeconómicas “las pagan siempre los mismos”, a decir del presidente nacional de EAPN, Carlos Susías, que asegura que las personas en riesgo de exclusión social superan en España los ocho millones y en el entorno europeo -una de las zona más ricas del mundo- los 78 millones.
“A pesar de los últimos años de gran desarrollo en España, mantenemos desde el 96 el 20% de pobreza relativa y un 3% de pobreza severa”, recordó.
En este contexto, el máximo portavoz de la Red Europea de Lucha contra la Pobreza y la Exclusión Social en el Estado español (EAPN-ES) aseguró que estas cifras desmontan “ese cuento de que para distribuir primero hay que crecer”. Pero además, este paradigma llega hasta los tiempos de desaceleración “en los que nos dicen que nos tenemos que apretar el cinturón y, mientras desde el 2007 nos dicen que no hay dinero para subir las rentas mínimas, nos encontramos un año más tarde que sí lo hay para salvar a la banca y al mundo financiero”.
Por esta razón, afirmó que los pobres “no son los responsables de lo que está ocurriendo, y sí lo son los que retienen los fondos”, a la vez que argumentó que si los sistemas políticos apuestan por eliminar la pobreza “se fomentará el aumento de riqueza y habrá más desarrollo”. “Los más vulnerables no ahorran porque sus pequeñas rentas las consumen”.
En otro momento, Susías recalcó que el encuentro se enmarca dentro de otras citas internacionales con la vista puesta en la celebración en 2010 del Año Europeo de Lucha contra la Pobreza y la Exclusión Social.
Dentro de unos meses terminarán los objetivos de erradicación de la pobreza marcados en Agenda de Lisboa, por lo que “estamos proponiendo una nuevo marco con unos fines más reales, cumplibles y medibles”.
Pero estas nuevas estrategias contienen una novedad, que es la incorporación de aquellos que “generalmente no son escuchados”. En concreto, en este encuentro se diseñarán unas propuestas concretas “con sus demandas”, que esperan sean respondidas en las políticas públicas de inclusión.
“Es importantes ver cómo se sienten las personas porque una cosa es que las ayudemos y otra que les organicemos su vida a nuestra imagen y semejanza”, explicó Susías.
Aseguró que los procesos de participación mejoran cuando se comparten experiencias, las mismas que este sábado evaluarán y cerrarán las más de cien personas que han discutido sobre su situación de vulnerabilidad.