La concejala de Bienestar Social del ayuntamiento de Miguelturra, Fátima Mondejar, acompañada por la coordinadora de Servicios Sociales del consistorio, Mª Ángeles Castellanos y la técnica del Proyecto de Prevención del Absentismo Escolar, Beatriz Azaña, presentaba en la mañana del miércoles el programa de “Apoyo en la prevención del absentismo escolar y ayuda al éxito académico 2018”.
Mondejar explicaba que desde el municipio de Miguelturra “observamos la necesidad de sensibilizar, formar y dinamizar a la comunidad educativa con el fin de abordar esta problemática de forma integral”. La edil señalaba que el objetivo general de este programa es prevenir el absentismo y el abandono escolar en el municipio de Miguelturra, concienciando a toda la comunidad de la importancia y el derecho del menor a la educación.
De esta manera, a través de campañas sobre el absentismo escolar “se pretende sensibilizar a las familias, asociaciones y colectivos del entorno del menor para que se impliquen como elementos activos que potencien la escolarización y la integración de los menores”.
La responsable de Bienestar social indicaba que durante el curso escolar, y como en años anteriores, se ha desarrollado este programa con diferentes actividades como: un encuentro de convivencia, un taller de técnicas de estudio, taller de autoestima, de habilidades sociales y estrategias de relajación, aula de intervención socioeducativa y el sexto concurso de carteles y eslóganes. Actividades que contaron con un total de 609 participantes.
Desde 2009 trabajando para prevenir el absentismo
Por su parte, Mª Angeles Castellanos recordaba que este proyecto de prevención de absentismo escolar comenzó su andadura en el año 2009, a través de una subvención de la Diputación Provincial de Ciudad Real, y desde el equipo de Servicios Sociales se consideró la necesidad de abordar esta problemática, “articulando un proyecto con el objetivo fundamental de prevenir el absentismo escolar y como consecuencia el abandono escolar desde las edades más tempranas, así como proporcionar las herramientas necesarias para fomentar el éxito escolar”.
Castellanos indicaba que este proyecto se ha ido reformulando a lo largo de los años y adaptando así “a las necesidades y las demandas que han ido surgiendo” y que su principal objetivo es disminuir el riesgo de abandono en las edades más tempranas, realizando una serie de actuaciones de tipo preventivo. Está dirigido principalmente a niños y niñas de edades comprendidas entre los 6 y los 16 años así como a padres, madres y tutores de los centros educativos, los colegios y la comunidad y el entorno social en general.
La coordinadora de Servicios Sociales destacaba además que hay que tener en cuenta que hay una serie de menores que se encuentran en una situación de desventaja y que constituyen un colectivo con más factores de riesgo de desadaptación escolar. Además, añadía que, “también las familias son un ámbito fundamental con el que intervenir ya que lógicamente existe una estrecha correspondencia entre las características que se dan en el entorno familiar con las conductas que los y las menores puedan llegar a manifestar”.
Actividades para 2018
Por su parte, Beatriz Azaña, detallaba las actividades que se van a hacer a lo largo de este año 2018. Así explicaba que hay actividades que se vienen desarrollando desde el inicio del proyecto en el 2009 como son los talleres de habilidades sociales ya que “nos parece importante reforzar la autoestima de los niños puesto que eso beneficia también su rendimiento académico y sus relaciones personales”.
Por otra parte, comentaba que hay otras actividades que se han ido introduciendo a lo largo del proyecto y que destacan por su elevada participación y el buen resultado obtenido como los talleres de iniciación a las técnicas de estudio, que se imparten a 4º y 5º de Primaria y se desarrollan desde servicios sociales en sus propias instalaciones.
También se desarrollan talleres de técnicas de estudio con alumnado de 6º de Primaria, que se imparten directamente en los colegios y dentro del horario lectivo, “con lo que se llega a la totalidad del alumnado de 6º de Primaria de la localidad”. Además, también con alumnado de 6º de Primaria, se realiza el taller de cambio de etapa en el que se trabajan los temores y los miedos que tanto los niños y niñas como las familias tienen a ese cambio de etapa y en el colabora la psicóloga de servicios sociales.
En cuanto a las actividades más generales que también se vienen desarrollando desde el inicio del proyecto, Azaña señalaba el concurso de carteles, que este año cumplirá su séptima edición y que está dirigido a todo el alumnado de Primaria, desde 1º a 6º, y en el que se establecen distintas categorías y se da un diploma por curso escolar.
Convivencia
Otra actividad que destaca por la implicación que tiene toda la comunidad educativa es la Jornada de Convivencia en la que colaboran tanto las AMPAS como los orientadores escolares, el personal de servicios sociales y voluntarios y que se suele desarrollar en el CERE de la localidad.
Azaña explicaba que es una actividad que da cabida a todos los niños y niñas de sexto curso de todos los colegios de la localidad y cuyo principal objetivo es que “a través de una Gymkhana puedan establecer vínculos de cara a ese paso a Educación Secundaria y por lo tanto al instituto”. Como novedad este año, indicaba que “a petición del Ayuntamiento de Pozuelo de Calatrava y puesto que sus chicos y chicas también vienen al instituto Campo de Calatrava, se va a coordinar con el colegio de Pozuelo para que esos niños y niñas de sexto curso también participen”.
Además, se continuará trabajando con alumnado de secundaria a través de los talleres y sobre todo reforzando la acción tutorial directamente en las aulas. Azaña indicaba que “el año pasado ya se trabajaba con 1º y 2º de la ESO a través de talleres como la imagen corporal y las habilidades sociales durante la acción tutorial, con lo que llegábamos a unos 250 niños y niñas”. Como un siguiente paso a estos talleres también se ha establecido el aula de intervención socioeducativa que trata de llegar a esos alumnos que tienen más dificultades académicas.
Este año, explicaba la técnica, se va a realizar con las familias que desde servicios sociales se tienen en intervención y también se van a derivar niños con problemas de absentismo y falta de hábitos de estudio por parte del Instituto y del colegio Nuestra Señora de la Merced.
“Nos parece importante poder llegar a ese colectivo más desfavorecido con los que se va a trabajar unos objetivos concretos como son: mejorar las relaciones interpersonales, concienciar sobre conductas problemáticas para poder reducirlas, aprender a afrontar los conflictos y estrategias de auto control”.
Al mismo tiempo se va a seguir apoyando como en años anteriores la acción tutorial en el instituto Campo de Calatrava.
