Ambos representantes municipales recorrieron, junto al director del proyecto, Juan Zapata Alarcón, esta fortaleza de origen musulmán. En esta primera visita estuvieron acompañados por las también concejalas del Equipo de Gobierno, Mari Pepa Ciudad, responsable de Educación y Servicios Sociales y Ángela Ruiz Espinosa, responsable de Festejos, Mujer y Juventud; además, en calidad de invitados, estuvieron presentes en dicha visita el ex alcalde Félix Martín, en reconocimiento de sus esfuerzos por poner en marcha este proyecto y el gerente de la Asociación para el desarrollo del Campo de Calatrava, Carlos Corella Anaya, cuya presidenta es la alcaldesa de Calzada de Calatrava, la comitiva se complementaba con el Técnico de Turismo, Jaime Vélez Gómez.
Allí fueron recibidos por el citado director del proyecto, el Dr. Juan Zapata Alarcón, profesor de Historia del Arte de la UCLM, quien a su vez estaba acompañado por parte de un equipo multidisciplinar integrado por Historiadores del Arte, Historiadores, Arqueólogos, Arquitectos y destacados profesionales del ámbito nacional e internacional en el campo de la documentación y la virtualización del patrimonio, la interpretación y reconstrucción 3D, así como de la difusión y promoción audiovisual. Entre ellos se encontraban en el lugar el investigador Jesús Manuel Molero García, el arqueólogo David Gallego Valle y el arquitecto Javier Navarro Gallego.
Dicho equipo multidisciplinar, además de los citados anteriormente, se complementa con el profesor de Historia del Arte de la UCLM Enrique Herrera Maldonado; con la Dra. María Josefa Cuesta García de Leonardo, profesora titular del Departamento de Historia del Arte de la Facultad de Letras de la Universidad de Castilla La Mancha; con Ana Cristina Peña Ruiz, licenciada en Bellas Artes; con Jaime García Carpintero López de Mota, Investigador de Historia Medieval y las investigadoras María del Pilar Carreras García y Bárbara López Sotos.
En su visita a una fortaleza, que “por primera vez se abrirá a la visita pública”, la alcaldesa calzadeña, destacaba el elevado interés de este proyecto “para nuestro turismo cultural y también natural, así como para la difusión y promoción de Calzada de Calatrava y su entorno como destino turístico en el marco del Parque Cultural Campo de Calatrava”.
El proyecto denominado ‘El patrimonio cultural calatravo como recurso dinamizador del turismo en el Campo de Calatrava: castillos de los Cristianos y Salvatierra’, está financiado por el Grupo de Acción Local Campo de Calatrava y por el Ayuntamiento calzadeño, quien además aporta un equipo de personas para labores de limpieza, adecuación y accesibilidad. Dicho proyecto contempla, según la regidora, “la puesta en marcha de un Centro de Recepción de Visitantes, junto a la nueva Oficina de Turismo, con contribuciones visuales de última tecnología en reconstrucción virtual, así como el rigor científico aportado por los responsables del proyecto, como garantías más que suficientes para considerar esta iniciativa, como una oportunidad inmejorable para indagar en una etapa desconocida de nuestra historia”.
Para ello, se está teniendo en cuenta aspectos fundamentales como la ‘Aplicación de la normativa autonómica y nacional’ sobre la protección y conservación del patrimonio cultural. El principio de Intervención mínima-respeto máximo con el entorno material y natural. Su perfecta conexión con el Plan Estratégico del Parque Cultural Campo de Calatrava ya que el proyecto contribuye a poner en práctica algunas de sus directrices más sensibles con la dinamización del turismo cultural de la comarca.
Durante la visita, el Dr. Juan Zapata, explicó los trabajos realizados, así como la “importancia, tanto del yacimiento como de las buenas perspectivas que tiene de cara al futuro”.
Desarrollo del proyecto
El desarrollo de este proyecto se está articulando en torno a la protección, estudio y difusión como principales ejes de actuación. Con ellos se pretende mantener la integridad material de los espacios estudiados, contribuir en su mejor conocimiento para darles más valor y en la seguridad de los individuos que los visiten para su disfrute, mediante una oferta turística racional, atractiva y sostenible.
Por lo que se están llevando a cabo actuaciones como la de mejorar, en la medida de lo posible, la protección de ambos emplazamientos, a través de pasos delimitados con barreras físicas, para un acceso controlado de visitantes.
El proyecto no contempla una campaña de excavación arqueológica, pero la necesidad de crear los diferentes itinerarios, de fijar cartelería y de otras intervenciones similares obliga a la realización de un sondeo arqueológico básico que garantice el desarrollo de los trabajos con seguridad y sin perjuicio para ambos yacimientos.
El Castillo de Salvatierra está declarado Bien de Interés Cultural, por lo que queda protegido por la Declaración genérica del Decreto de 22 de abril de 1949, y la Ley 16/1985 sobre el Patrimonio Histórico Español, no pasa lo mismo con el castillo de los Cristianos o castillo de D. Alonso, que al ser un yacimiento totalmente desamparado en términos legales, se han iniciado los trámites que permitan obtener la figura de protección que corresponda de acuerdo con la Ley de Patrimonio Cultural de Castilla-La Mancha.
Visitas guiadas
Con el fin de acercar el patrimonio a la ciudadanía mediante contenidos históricos, artísticos y arqueológicos de rigor, y abrir el acceso público de forma controlada. Se creará una ruta de senderismo en la que también se podría incorporar como punto de destino la cercana fortaleza de Calatrava la Nueva, iniciándose en el Centro de Visitantes, anexo situado en la nueva Oficina de Turismo en Calzada de Calatrava. De este modo se conseguiría articular una ruta cultural aún más atractiva y coherente en torno a los grandes castillos calatravos.
Castillo de Salvatierra
El castillo de Salvatierra, cuyo origen puede remontarse a época Omeya, fue profundamente remodelado durante la segunda mitad del siglo XII y principios del XIII tanto por los almohades como por los calatravos en su etapa de ocupación entre los años 1198 y 1211, período en el que la orden se refundó y pasó a denominarse Orden de Salvatierra. La defensa heroica de los caballeros durante la campaña almohade de 1211 desencadenó la decisiva batalla de Las Navas de Tolosa en 1212.
Pero por encontrarse en una propiedad privada, este castillo siempre ha permanecido cerrado a la visita pública, “de ahí que nuestro proyecto suponga una importante iniciativa para la puesta en valor de los recursos patrimoniales no solamente de Calzada, sino de todo el Campo de Calatrava” ha subrayado García Ríos, quien aprovecha la ocasión para agradecer a los propietarios, “que siempre hayan mostrado una actitud favorable y predispuesta a colaborar y facilitar el desarrollo de esta iniciativa”.
Aunque se encuentra en un avanzado estado de ruina, aún son perceptibles imponentes estructuras arquitectónicas como la torre del homenaje, grandes aljibes y espacios abovedados, así como poderosos recintos amurallados con mampostería de cuarcita. En su arquitectura destaca la sillería de piedra volcánica para el encadenado de las esquinas de las torres.
Destaca aún la torre del homenaje construida en mampostería y esquinas de sillería de roca volcánica de gran tamaño, que le dan un contraste en tonos rojizos. Se pueden observar distintos lienzos de muralla y torres defensivas, que conformaban un espacio inabordable, aprovechando la escarpada orografía de la falda sureste para completar las protecciones. Igualmente, se pueden distinguir en estos muros los dos tipos constructivos que encontramos en el recinto, cada uno correspondiente a las dos culturas que lo poseyeron: el hormigón de cal y canto cristiano y el hormigón islámico conocido como “tabiya”. En la ladera frente a Calatrava se aprecia el espacio donde se asentaba la población entorno al castillo y que debió ser la zona de más temprano abandono ya en el siglo XII. En el interior del monumento aún se conservan varias bóvedas completas pertenecientes a espacios militares y de almacenamiento, cámaras subterráneas, aljibes construidos en mampostería.
El castillo de los Cristianos o castillo de D. Alonso, de titularidad pública, es otra pequeña estructura fortificada que se levanta en la sierra de la Atalaya, a unos 600 metros en línea recta del castillo de Salvatierra, del que funcionaba como padrastro, y que debió ser construido a principios del siglo XIII.
