El consejero de Hacienda y Administraciones Públicas, Juan Alfonso Ruiz Molina, ha destacado hoy que Castilla-La Mancha ha reducido el déficit un 75 por ciento desde el inicio de la legislatura, al pasar de un déficit de 605 millones de euros en 2015 a una cifra de 149 millones en 2018, lo que, además, le ha permitido cumplir con el objetivo de estabilidad presupuestaria fijado para el año pasado para las comunidades autónomas.
Así lo ha puesto de manifiesto Ruiz Molina en una rueda de prensa en la que ha informado del informe sobre el grado de cumplimiento del objetivo de déficit del ejercicio 2018 que la Consejería de Hacienda y Administraciones Públicas elevó al Consejo de Gobierno esta semana para su toma en conocimiento.
Tal como ha puesto en valor el consejero de Hacienda y Administraciones Públicas, los datos que se recogían en este informe son “totalmente coincidentes” con los que ha dado a conocer hoy el Ministerio de Hacienda, al estar certificados por la Intervención General de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha y por la Intervención General del Estado.
En este sentido, Ruiz Molina ha señalado que el Ministerio de Hacienda ha puesto hoy de manifiesto que Castilla-La Mancha cumple con el objetivo de déficit para el ejercicio 2018, que estaba establecido en el 0,4 por ciento del Producto Interior Bruto (PIB) para las comunidades autónomas.
Así, el déficit en el que incurrió la Comunidad Autónoma en el ejercicio 2018 fue del 0,36 por ciento del PIB, es decir, por debajo del objetivo. En términos absolutos el déficit ascendió a 149 millones de euros.
Este importe es consecuencia del buen comportamiento que han tenido tanto los ingresos no financieros como los gastos no financieros que ha venido gestionando la Comunidad Autónoma a lo largo de este ejercicio. Por lo que se refiere a los ingresos no financieros, el grado de ejecución ha sido del 96 por ciento. Por su parte, el grado de ejecución de los gastos no financieros ha sido del 95 por ciento.
A continuación, Ruiz Molina ha explicado a los medios de comunicación que, tal como informó el pasado martes en el Consejo de Gobierno, el déficit alcanzado ha sido consecuencia de una planificación de lo que esta Comunidad Autónoma se podía permitir en cuanto a reducción del déficit.
En el informe del que tomó conocimiento el Consejo de Gobierno se recoge que el déficit de Castilla-La Mancha en el ejercicio 2015 ascendía a 605 millones de euros y se ha reducido progresivamente estos años hasta alcanzar la cifra de 149 millones en 2018, lo que supone que, en lo que ha transcurrido de legislatura, se ha reducido el déficit público en un 75 por ciento.
Por lo tanto, Castilla-La Mancha cerró 2018 con 456 millones de euros menos que de déficit que al inicio de la legislatura.
