El códice 1046B Tumbo Menor de Castilla, en cuya lámina 15 aparece una miniatura que representa el 850 aniversario de la cesión por parte de los Reyes Alfonso VIII y Leonor de Plantagenet del Castillo y la Villa de Uclés a la Orden de Santiago, recalará en el icónico monasterio de la localidad dentro de la programación del aniversario de este hito histórico, en cuya programación ya está inmersa la Fundación Fernando Núñez y que vivirá con esta exhibición su particular pistoletazo de salida.
El presidente de la Fundación, Fernando Núñez ha sido el primero en tomar la palabra en la presentación para informar de que este códice llegará el 14 de junio y durante tres días a las instalaciones del Monasterio. “Ya quisiéramos que el Monasterio estuviera en una gran urbe y con más presupuesto, pero estamos en la Villa de Uclés, en la Castilla profunda y deshabitada”, ha dicho Núñez.
Núñez ha recordado que se celebrará este 850 aniversario de este hecho histórico en torno a “una de las grandes órdenes religiosas militares que forman parte de la historia de España.
Una cesión que fue un hecho determinante en la historia de la Península Ibérica gracias a una Orden de Santiago que “tuvo mucha influencia en el descubrimiento de América” por su labor de gran constructora de universidades o vías de comunicación. El códice “estará aquí un sólo momento para demostrar este acontecimiento histórico”, ha celebrado Fernando Núñez.
El códice que llegará en el mes de junio se conserva en el Archivo Histórico Nacional, encargado de guardar todos los archivos de las Órdenes Militares, de sus instituciones y del Consejo de las Órdenes.
Un orgullo para el pueblo
El alcalde de Uclés, José Luis Serrano, ha asegurado por su parte que para la localidad es “un orgullo” no sólo la recepción del códice, sino toda la programación de actividades.
El año 1174 fue “un antes y un después” para Uclés cuando la Orden vino a traer “convivencia durante siglos”, razón por la cual hay que “celebrar este aniversario”.
Para ello, ha pedido a los pueblos vecinos celebrar “este gran acontecimiento”, comprometiendo el trabajo municipal para que “esta celebración nos acerque más a la historia”.
Una memoria “USB” del siglo XIII
El director del Archivo Histórico Nacional, Juan Ramón Moreno, también ha mostrado su satisfacción, no sólo como director, sino también como castellanomanchego.
Coinciden ahora dos líneas, “una de acción y otra de interés de la Villa por celebrar su pasado y su identidad”. El Archivo fue encargado de recoger los testimonios escritos de Uclés en plena desamortización de Mendizábal, algo que “para todas las instituciones poseedoras de patrimonio supuso una implosión”.
Afortunadamente, el Monasterio “se refugió en la Real Academia de la Historia”, matriz del actual Archivo Histórico Nacional, que recogió así su “primer gran fondo” en 1866, nacimiento para “cuidar los archivos de las instituciones desamortizadas”.
“Desde entonces hemos guardado documentación importante y mucha salió de aquí, entre ellas este documento. Es un documento excepcional porque es un documento de memoria. Una memoria USB del siglo XIII, que se creó para tomar memoria por su los pergaminos originales no soportaban el paso del tiempo”, ha dicho.
Este códice, que ha salido pocas veces del Archivo, “goza de muy buena salud” y está “en un estado de conservación excepcional”, ha dicho el director del Archivo.
Amplia información
El director de la Fundación Fernando Núñez, David Pérez, también ha intervenido en el acto para avanzar que la programación no se limitará a esta exhibición del códice, muestra que será sólo el punto de partida de un amplio cartel, con programación musical y de verano, y siempre con “un guiño a la celebración” de los 850 años de la cesión.
“Queremos que la gente se sienta identificada con su territorio y con su historia”, ha deseado David Pérez de cara a esta gran efeméride.
La subdirectora general de los Archivos Estatales, Ana María López Cuadrado, se ha alineado con la intención de David Pérez de hacer que la gente sienta como suyos estos documentos, como todos los que custodia el organismo.
“Hay que acercar este patrimonio documental allá donde ese patrimonio estuvo, donde esos documentos convivieron con sus gentes. Queremos que vuelvan a sus lugares de origen para que los ciudadanos los sientan como suyos”, ha dicho, asegurando que las personas “no pueden vivir sin memoria”.
Los archivos estatales tienen como función ser “guardianes de la memoria”, una memoria que ahora quieren poner a disposición de todos los ciudadanos, como se ha hecho con la Carta Puebla de Sanabria a esa localidad, ejemplo esgrimido por la subdirectora general.
El Obispado, agradecido con la Orden de Santiago
Por último, el vicario general de la Diócesis de Cuenca, Antonio Fernández, ha celebrado que este documento “tan relevante para la historia medieval de la provincia y de España” vaya a recalar en el Monasterio.
El Obispado de Cuenca, ha dicho, “no se entiende sin Alfonso VIII, sin este Monasterio y sin los caballeros de la Orden de Santiago”, un rey que propuso al Papa Lucio III la creación de un nuevo obispado para aglutinar Ercávica, Segóbriga y Valeria.
Una Orden religiosa y militar que “dejó una impronta que perdura hasta nuestros días”, con un Monasterio que ha inspirado durante siglos “corrientes de espiritualidad, de música, de arte”.
