La nieve de enero, la lluvia y frío de febrero, el despertar de mariposas y flores en marzo, los múltiples colores de abril y el melodioso mayo aparecen en el Calendario Solidario 2019 de Aspas, con divertidas e imaginativas instantáneas realizadas por la fotógrafa Mayka Izquierdo y protagonizadas por 23 chavales de entre dos y doce años.
El calor de junio con un sol hasta para tenderse uno mismo, los baños con peces y estrellas de colores de julio, la toalla en la orilla del río o la playa en agosto, el viento de septiembre que alienta hasta el vuelo de los superhéroes, la caída de las hojas y el regreso de las bufandas en octubre, la terrorífica diversión de Halloween que da paso a noviembre y la alegría e ilusión de la Navidad en diciembre, aparecen en un calendario que se puede adquirir por cinco euros en la sede de Aspas, la Oficina Municipal de Turismo y las tiendas de Pan Real.
Se trata de una iniciativa con la que Aspas obtiene recursos para las prestaciones que ofrece a las personas con dificultades auditivas y, sobre todo, contribuye a visibilizar esta discapacidad, destacó el presidente de la asociación, Ángel Romero, que agradeció el apoyo del Ayuntamiento y la Diputación para editar, por sexto año, este calendario solidario.
A su presentación, asistió la concejal de Participación Ciudadana, Juventud e Infancia, Sara Martínez, que resaltó el objetivo del equipo de Gobierno municipal de seguir trabajando con las asociaciones y la apuesta por construir una sociedad “accesible para todos seamos como seamos”, al tiempo que animó a adquirir este calendario, con lo que se contribuye a “ponérselo un poquito más fácil a quienes lo tienen un poco más difícil”.
También participó en la puesta de largo del calendario el diputado provincial, Dionisio Vicente, que resaltó el respaldo de la Diputación tanto a la labor que realizan las asociaciones en el ámbito del bienestar social como a actuaciones encaminadas a favorecer el acceso al mercado laboral de personas con diferentes capacidades.
Para Mayka Izquierdo, responsable del estudio ‘A través de un objetivo’ situado en Pozuelo de Calatrava, le resultó fácil trabajar con los niños y la experiencia de realizar este calendario fue “muy gratificante”.
