El patio del claustro del antiguo Convento de la Merced será escenario el jueves 13 de junio, a las 20 horas, de la presentación del libro ‘Quercus. En la raya del infinitivo’, reivindicativa novela de Rafael Cabanillas Saldaña sobre el abandono de los pueblos por carencia de servicios e infraestructuras y unas exigencias a menudo desproporcionadas e invasivas para el entorno.
El que fuera director general de Turismo y Artesanía de la Junta de Castilla-La Mancha, también ha sido maestro rural en núcleos poblaciones como San Pablo de los Montes y Robledo del Buey, pedanía de Los Navalucillos, donde la única casa que tenía agua corriente, recuerda, era la del maestro, donde él enseñaba a los hijos de los guardas de las fincas.
Con referentes como ‘Los santos inocentes’, de Miguel Delibes, y ‘La lluvia amarilla’, de Julio Llamazares, Cabanillas vuelca su experiencia y conocimiento de este entorno en su décimo cuarto libro, en el que la trama se inicia nada más acabar la Guerra Civil, en una primera postguerra en unas zonas de sierra donde se vive el gran contraste de “fincas de caza con su palacete y tren de vida extraordinario cuando la gente se estaba casi muriendo de hambre”.
La novela narra, desde la ficción, la historia de un joven que huye de la Guerra Civil con “tanto miedo” que se esconde en la sierra, donde pasa varios años “sobreviviendo como un animal” hasta que consigue “vencer un poco esos miedos”, salir de la zona de la cueva en la que se refugia, empezar a relacionarse y conseguir un empleo, comenta Cabanillas, que indica que el protagonista del libro terminará convirtiéndose en un “símbolo” de la lucha por romper la “perniciosa” dinámica que va obligando a la gente a emprender el éxodo a la gran ciudad que, en muchos casos, consistía en irse a los extrarradios, por ejemplo, de Madrid a vivir en chabolas por la falta de oportunidades en su entorno natal.
En un enclave que podría corresponderse con las sierras de los Montes de Toledo, Extremadura o Andalucía, sucede el argumento de la novela en la que el cerramiento de una finca para que no salga la caza mayor de 15.000 hectáreas proporciona eventualmente trabajo a los habitantes, pero terminará significando el fin de sus “modos de vida tradicionales”, porque, una vez cercada, no podrán acceder con su ganado a esos terrenos y los árboles –quercus- como encinas, alcornoques o quejigos que con su bellotas les proporcionaban sustento a ellos y sus animales.
Cuestiones como la España vaciada y el abandono de los entornos rurales subyacen bajo la trama de esta novela de Cabanillas, que, a este respecto, alude a la estructura “latifundista” de grandes fincas en la sierra donde “el mayor porcentaje de la tierra” lo tienen “muy poquitos propietarios” e indica que parece que, “desde la postguerra, interesó más el abandono, que no hubieran apenas carreteras, luz eléctrica, conducciones y saneamientos de agua para que la gente no llegara a esos grandes territorios”.
Puede que si eres uno de esos propietarios, algunos de los cuales “provenían de la estructura de poder del franquismo que se habían hecho con esas grandes propiedades”, te decantes porque “no hagan proyectos de carreteras o electrificación, si no que ‘mejor déjalo ahí que lo tengo virgen para mí y aquí no llega nadie’”, comenta Cabanillas, que expone que el aislamiento, sin que llegase el progreso y modernidad, ocasionó que “mucha gente se marchase porque no quedaba más remedio”.
“Lo único positivo es que se ha salvaguardado la virginidad de esos territorios”, unos “paraísos naturales para un disfrute privativo, de muy pocos”, arrastrando, a su vez, determinadas medidas “a la miseria a muchísima gente” y el éxodo a las ciudades.
Con la llegada de la democracia, “se iniciaron procesos de modernización pero tan insuficientes” que el abandono ha ido “a más” en estas zonas rurales, agrega Cabanillas, quien también trabajó durante tres años en Suiza como profesor y resalta cómo todos los servicios llegan hasta el último rincón de ese montañoso país. En este sentido, aboga por medidas de apoyo a la población como exención de impuestos y ayudas al mantenimiento tanto de trabajos tradicionales que contribuyen a la conservación paisajística y del entorno como modernos en estas zonas rurales.
Luis Arroyo, ex rector de la UCLM, y Teresa Ibáñez, autora del blog ‘Los libros de Teresa’, participarán el jueves en la puesta de largo del nuevo libro de Cabanillas, publicado por la Editorial Cuarto Centenario.