El Formac Villarrubia debuta este sábado, a partir de las 20 horas, ante su hinchada. El rival, como no podía ser de otra manera, todo un lujo como es el Córdoba, un transatlántico que hace unos años campeaba por la Primera División y que por sus problemas institucionales se ha visto abocado al pozo de la Segunda División B.
Será una cita histórica, como ya lo fue hace unos meses frente al Coria, Bergantiños o Alcobendas Sport. Se espera un ambiente de gala en el Nuevo Campo con casi 2000 personas en las gradas. Y es que a los casi 800 socios del Villarrubia habría que añadirle los más de 500 seguidores que llegarán desde Córdoba. Además, un grupo nutrido de gente suspira por hacerse con su entrada horas antes de que comience el encuentro.
En cuanto a lo deportivo, será una bonita noche para ver quién puede sobre el césped artificial del coliseo villarrubiero, si el potencial del Córdoba o la ilusión del Formac Villarrubia, si David o Goliat, o si el ejército de tanques y bazucas de Enrique Martín o los obreros de pico y pala de Javi Sánchez. Sea como fuere, el fútbol es esa montaña rusa que no entiende de lógicas ni de méritos y donde siempre juegan once contra once y siempre gana Alemania, como diría alguno.
Poco que perder y mucho que ganar
En cualquier caso, todas las apuestas dan como claro favorito al Córdoba por plantilla, nombres, hombres, proyecto y presupuesto. Esto supone que el Villarrubia vaya a afrontar el partido con las ideas muy claras y conscientes de que tiene poco que perder y mucho que ganar. Pero ese favoritismo es también un arma de doble filo para el equipo cordobés que llega con la presión de tener que ganar todos los partidos para estar siempre en la zona alta y luchar por el claro objetivo – y clara necesidad – del ascenso de categoría.
Tras vencer por la mínima al Recreativo Granada el pasado domingo en el Arcángel, el Córdoba sigue engrasando la maquinaria. Cabe destacar que todos los pupilos de Enrique Martín tienen experiencia en Primera y Segunda División, e incluso en Champions, como es el caso de De las Cuevas, que sabe lo que es jugar en la élite en equipos como Atlético de Madrid y Osasuna, respectivamente. El central panameño Fidel Escobar, el portero Isaac Becerra, el cerebro Javi Flores o el punta Ortuño son algunos de los nombres propios de este Córdoba que se pondrá a prueba en el Nuevo Campo.
En la previa del encuentro, el entorno del Córdoba ha hablado de respeto y de cero confianzas al saber que llegan a la segunda jornada para medirse a un rival recién ascendido, que tiene el único campo artificial de la categoría y que tiene la ilusión por bandera. De hecho, tan en serio se lo tomó el técnico que aprovechó un viaje de paso para pasare por el Nuevo Campo y hacer un examen del terreno de juego.
Por su parte, el Formac Villarrubia ha preparado la cita como un partido más. El punto cosechado en el Nuevo Mirador ante el Algeciras ha dado alas a los de Javi Sánchez que llegan con ganas e ilusión para competir con el máximo favorito de la categoría. Víctor Algisí finalmente llegará, a pesar del golpe recibido. Lo que no está claro es si entrará en el once inicial. El que no estará es el lateral Víctor, jugador procedente del Atlético de Madrid de División de Honor y que todavía no se ha tramitado su ficha.
Sin miedo
“El debut es algo histórico para todos. Es muy bonito y tenemos que mentalizarnos en competir. El Córdoba es un equipo que tratará de adaptarse cuanto antes al terreno de juego, que no querrá cometer errores. Imagino que jugarán más directo de lo habitual, pero tenemos claro que trataremos de que no se sientan cómodos”, explicaba Javi Sánchez en la previa del encuentro.
Y es que según el toledano, “hablamos de un equipo que todos tienen experiencia en Primera y Segunda División y que podríamos escribir una página de cada uno de sus nombres, pero creo que hay jugadores como De las Cuevas, Fidel Escobar, Javi Flores, Owusu, Imanol García o Becerra que destacan en la categoría”.
No obstante, a pesar del potencial del rival, “no tenemos ningún miedo porque no tenemos nada que perder y sí mucho que ganar. Llegamos con mucha ilusión y sabemos que todo pasa por hacernos fuertes en casa”. Por último, vaticinaba que “el equipo que menos cometa errores se llevará el partido. Creo que habrá pocos goles”.