Jesús Vicente Giménez de los Galanes, conocido como Tato Giménez (12-4-1979, Daimiel), no oculta que echa de menos el banquillo. El técnico daimieleño no entrena desde el final de la temporada 2016/17, cuando cogió al Almagro en la jornada 25 y logró el objetivo de la permanencia con el que llegó, pero el club encajero no le renovó tras ello ante su sorpresa. “La vida de un entrenador es muy inestable y sacrificada, con un futuro incierto”, apunta y es consciente de que ahora es complicado conseguir un banquillo, “porque están ocupados la mayoría por técnicos que fueron jugadores profesionales”, defiendiendo a la vez que “no hay una relación directa de mejor rendimiento de un equipo con un entrenador ex jugador que respecto a uno formado con perspectivas académicas”.
Alejado por ahora de los entrenamientos, Tato Giménez quiere seguir trabajando y formándose en cuestiones del fútbol. Y en este curso ha entrado a formar parte del claustro de profesores de la Universidad Europea de Madrid, dentro de la facultad de Ciencias del Deporte como profesor Doctor. En ella hace las labores de coordinador de Trabajos de Final de Curso (TFG) que los alumnos de la facultad realizan con tema libre y a la vez trabaja dentro del grupo de investigación del claustro, aportando la experiencia con la que cuenta como entrenador en equipos como el Villarrubia, Móstoles, Madridejos, el Concordia Elblga de la Liga polaca o el propio Almagro. “Estamos analizando y estudiando el proceso del entrenamiento en el fútbol, factores como el análisis de la competición o la relación entre cómo se entrena y cómo se compite”, explica como ejemplo. Con una tesis doctoral y publicaciones en revistas académicas de prestigio, Tato Giménez mantiene vivos en su mente más proyectos, como la elaboración de un manual docente o escribir un libro. “Hay que estar bien preparado para cuando pueda llegarme la oportunidad de volver a entrenar”, recalca.
Al margen de su trabajo académico, el entrenador de Daimiel sigue vinculado al fútbol regional y provincial como colaborador en un programa deportivo de información en ImásTV. Por ello mantiene su atención a lo que ocurre dentro del Grupo 18 de Tercera División y tiene su particular análisis. “El grupo manchego es complicado. Creo que en él los entrenadores tienen que estar asociados con otros entrenadores, porque las largas distancias no permiten tener un gran control de los rivales”, apunta primero y después asegura no extrañarse “del gran rendimiento del Socuéllamos, lo está haciendo muy bien, con un entrenador (Mario Simón) que le viene bien al equipo”.
Sí que más preocupado está Tato Giménez por la situación de equipos provinciales “que están peleando por salir de la zona de descenso y les está costando mucho”. Sobre estos conjunto ciudarrealeños, la idea del técnico es clara: “Hay que dar más confianza a la gente de Ciudad Real. Hay que jugadores y técnicos muy preparados que están en otros equipos y tenemos que replantearnos si no es mejor reunir a jugadores de la cantera y de la zona. Creo que cambia poco el rendimiento entre los jugadores de fuera y los de aquí”. De ahí que Tato Giménez apueste en su opinión “por un proyecto con arraigo, con jugadores de la zona y que la gente se sienta identificada. Un proyecto con claridad, con futbolistas con proyección de Ciudad Real, que hay muchos competentes, a la larga puede resultar beneficioso”, concluye.