Esta acción se enmarca en una campaña especial centrada en el uso de cinturones de seguridad y sistemas de retención infantil (SRI).
Estos sistemas, diseñados para prevenir o reducir lesiones en situaciones de choque o salida de vía, son esenciales para la seguridad vial. El uso adecuado de cinturones de seguridad por parte de los conductores disminuye el riesgo de lesiones graves o mortales en un 60%. Además, afecta la seguridad de otros ocupantes al evitar que estos se conviertan en proyectiles durante un accidente.
Los sistemas de retención infantil, utilizados correctamente, reducen el riesgo de lesiones graves o fatales en niños hasta en un 60%. Aunque la eficacia de estos sistemas está demostrada científicamente, persiste un uso incorrecto, especialmente en el caso de sillas infantiles. Estudios han identificado varias características que tienen una fuerte asociación con el uso incorrecto de dichos elementos de seguridad en los vehículos, entre ellos, la edad del menor y el tamaño de los niños, el tipo de viaje en cuanto a su duración y/o distancia.
A nivel europeo, entre el 25% y el 50% de los ocupantes con lesiones mortales no usaban cinturón de seguridad, y solo un tercio de los niños estaba correctamente asegurado. Mejorar el uso adecuado de sistemas de retención podría evitar hasta 900 muertes anuales en Europa, según el Observatorio Europeo de Seguridad Vial.
Estudios en España indican que el 24% de las víctimas mortales en vías interurbanas entre 2017 y 2019 no utilizaban cinturón de seguridad. La falta de uso es más común en carreteras no principales y en personas de 15 a 44 años. El uso del cinturón es mayor en asientos delanteros (80%) que en asientos traseros (69%).
La falta de uso del cinturón contribuyó a 154 fallecidos en vías interurbanas en 2022, representando el 24% del total de víctimas mortales en turismos y furgonetas.
Por todo ello, la campaña de la Policía Local de Argamasilla de Alba busca promover el uso correcto de cinturones y sistemas de retención, especialmente entre conductores y pasajeros, para reducir las lesiones y salvar vidas en accidentes de tráfico.
Cabe señalar que la Estrategia Española de Seguridad Vial 2030 identifica como un área estratégica la “tolerancia cero con comportamientos de riesgo”, potenciando la vigilancia y control sobre las causas más habituales en la siniestralidad: distracciones, velocidad, no uso del equipamiento de seguridad y alcohol y drogas.
