Unas conductas prohibidas “que ponen en peligro sectores estratégicos, llevando a muchas explotaciones incluso a su desaparición”. En el caso concreto por el que se ha pronunciado la CNMC, queda demostrado “que fue un absoluto complot contra el sector ganadero de leche por parte de las empresas transformadoras con daños, en muchos casos, ya irreparables”, según ha informado la asociación en nota de prensa.
En este sentido, la organización agraria ha pedido que la sanción repercuta en los afectados a través de indemnizaciones y que haya mayores penalizaciones, llegando a privar a aquellas industrias que incurran en estas prácticas de su actividad comercial temporalmente.
Para Asaja Ciudad Real ese cese sería una respuesta ejemplar ante un comportamiento “absolutamente desleal con conductas abusivas”.