BM ALARCOS 25 |
BM PUERTO SAGUNTO 26 |
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Javier Teijón, Javier Sanz (3), Diego Rueda (1), Rolando Urios (1), Juanpe (4), Didac Talens (8) y Pepe Mora -siete inicial- Martín Dávila (3), Martxel Agorreta, Adrián Mendoza, Jota Serrano (1), Ricardo González ‘Riki’, Álvaro Moreno de la Santa (1), Marcos Herrera, Óscar Ruiz (p.s.) y Matic Pangerc (3). | Ignasi Admella, Nil Montserrat (2), Álvaro del Valle (9), Pau Ferre (4), Adrián Nolasco (1), Javier Manzano y Vicente Poveda (5) -siete inicial- Álex Ortega (1), Arón Díaz (1), Daniel Martínez, Daniel Sedano (1), Aitor Albizu (1), David García (1), David López, Javier Olivares y Diego Olba. |
ÁRBITROS Francisco Fernández Herrero y Manuel Mohedano Fernández. |
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PARCIALES CADA 5 MINUTOS 1-2, 3-6, 4-8, 7-9, 8-11 y 11-14 (descanso); 12-16, 13-16, 17-21, 21-23, 23-24 y 25-25 (final). |
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INCIDENCIAS Partido de la sexta jornada en el Grupo B de la División de Plata masculina de balonmano, disputado en la tarde de este sábado en el pabellón Quijote Arena de Ciudad Real. |
El buen partido del BM Alarcos ante el invicto líder, BM Puerto Sagunto, se quedó sin premio. No puntuó el equipo de Ciudad Real porque el rival anotó un siete metros con el tiempo cumplido, para llevarse los dos puntos por 25-26. Por detrás siempre fue en el marcador el cuadro local, que pudo mantenerse vivo en la pista con casta y juego colectivo pese a que tuvo momentos muy delicados. Aferrado así al choque, consiguió empatar por primera vez a falta de 40 segundos, pero no pudo después mantener, al menos, ese punto por ese gol final del rival. No tuvo el Alarcos recompensa al tuteo que mostró frente a un primer clasificado que, como ocurriera hace unas semanas aquí en la capital ante el Caserío, ganó en el último suspiro.
Salvo el 1-0 inicial, gol desde los siete metros de Javi Sanz, el Alarcos fue ya a remolque a renglón seguido. Un 0-4 de parcial para el Sagunto, con las ideas más claras en ataque para superar la defensa 5-1 local, le colocó por delante.
En esas diferencias para los visitantes continuó el choque, con un Alarcos más fallón en ataque, errando hasta cuatro tiros desde los siete metros en la primera parte y cinco en el total del choque. La máxima fue de cuatro con la que se llegó al cuarto de hora (4-8).
Tuvo entonces el Alarcos su mejor momento. Dos goles de Rueda y Dídac Talens redujeron la diferencia a dos con el 6-8 y los locales llegaron a tener posesión para ponerse a uno. No la aprovecharon y el Sagunto no perdonó después, para volver a ampliar la diferencia a cuatro (7-11).
Trató de mantenerse agarrado a la pista del equipo de Isidre Pérez, pero continuó fallando lanzamientos claros (más siete metros) para ver cómo el Sagunto adquiría la máxima hasta entonces de cinco goles (8-13, min. 27).
Una leve reacción final de los alarquistas, aprovechando la inferioridad rival de dos minutos y la buena aparición de Óscar Ruiz en portería, condujo el marcador al 11-14 con el que finalizó la primera parte.
Nuevamente los errores y fallos en los lanzamientos castigaron al Alarcos en el tramo inicial del segundo periodo. Solo un gol anotó en los primeros nueve minutos, aunque, al menos, Óscar Ruiz le mantenía en el partido con sus paradas (12-16, min. 5).
Dos aciertos en ataque permitieron por fin a los alarquistas recortar a dos goles la desventaja con el 14-16, lo que llevó al técnico visitante a parar el partido. Quedaba mucho por delante y el Alarcos seguía metido.
Ese parón volvió a llevar al Sagunto a los cuatro arriba, en un tramo en el que se intensificó más el ritmo, con ataques más rápidos e intercambios de goles para entrar en los últimos 10 minutos con un 21-23. Estaba todo por decidir.
Juanpe, en sus mejores minutos, puso a un tanto al Alarcos, para incrementar la esperanza y luego el equipo llegó a errar tres posesiones para el que hubiera sido empate, hasta que lo consiguió a falta de 40 segundos. Pero la última acción con pelota para el rival acabó en un discutido siete metros con el tiempo cumplido. Álvaro del Valle, el mejor del Sagunto, no falló para llevar al Alarcos a la derrota por 25-26. Murió en la orilla el equipo de Isidre Pérez, pero con la cabeza muy alta.