Panes gigantes, tortas colosales y sandías y melones ‘de campeonato’ se llevaron de ofrenda a la Virgen del Prado, junto a cientos de ramos de flores. Los mejores productos de la huerta manchega no podían faltar en un acto en honor a la Patrona en el que participaron cerca de sesenta asociaciones, peñas, clubs y cofradías.
Tomates, cebollas, calabacines, pimientos, coliflores, berenjenas, patatas, zanahorias y melocotones fueron algunos de los productos portados en cestas, junto a dulces como flores de sartén, magdalenas e incluso croissants, por parte de los fieles que realizaron un recorrido que partió de la Plaza Mayor para subir por Carlos Vázquez a Ruiz Morote, bajar por Ramón y Cajal hasta la Plaza del Pilar, donde los grupos de Coros y Danzas protagonizaron alegres bailes, Todos ellos se dirigieron desde la Avenida Alfonso X el Sabio hasta los Jardines del Prado y la Catedral.
Los ramos de flores, con ‘vivas’ a la Virgen, se colocaron a ambos del altar, en el que se depositaron frutos, hortalizas y dulces, a lo largo de una alegre ofrenda en la que se mostró la devoción por la Patrona, pidiendo su protección y llevándole lo más hermoso que da la tierra.
El presidente del Cabildo catedralicio, Bernardo Torres, destacó que la Madre de Dios acoge a todos los hijos y, especialmente, siente un cariño, dedicación y entrega mayores hacia los más pequeños, débiles y necesitados. Con la ofrenda de flores y frutos de esta tierra, se muestra el cariño a la Virgen y también “los anhelos y esperanzas de que entre todos podamos hacer que las cosas vayan bien, que entre nosotros no haya quien lo pasa mal, que logremos acoger a todos y que nadie se sienta excluido”. Torres destacó que la esencia de la fiesta de La Pandorga se basa en la devoción a la Virgen y animó a “no quedarnos en la periferia, en lo externo”, y no perder de vista lo verdaderamente importante que es que “María desde arriba nos mira con amor de madre”.
En verso el Pandorgo, Julio Santiago Sánchez Higuera, describió, por su parte, los trajes tradicionales que se lucen en esta conmemoración, aunque indicó que lo verdaderamente importante es acudir al encuentro con la Virgen del Prado, a quien pidió por el que pasa hambre y penurias, por la mujer maltratada y los niños desvalidos.
Abrieron el trayecto de la ofrenda las composiciones interpretadas por la Banda de Música de la Agrupación Musical de Ciudad Real, seguida por una representación muy hortelana de la pedanía de Las Casas, los Alabarderos de Bolaños de Calatrava y comitivas de los ayuntamientos de Saceruela y Pozuelo de Calatrava y la Asociación de Recreación Histórica Batalla de Alarcos. La Hermandad de Jesús de Medinaceli, la peña El Cangilón, los vecinos de La Poblachuela y la Sociedad de El Piélago se sumaron al acto, así como los Coros y Danzas ‘Virgen de los Llanos’ de Llanos de Caudillo, la Asociación de Vecinos Fuensanta del barrio del Larache, el grupo joven del Santo Sepulcro, la Asociación Manos Creativas y el Grupo de Coros y Danza María José Melero.
El Club Balonmano Alarcos, la Banda de Cornetas y Tambores Virgen del Prado, las peñas del Athletic de Bilbao, Dinosaurio, El Pilar, Morería, Big Bang y El Botellín también fueron protagonistas de la ofrenda, al igual que las Asociaciones de Coros y Danzas Nuestra Señora del Prado y Mazantini, las Hermandades de la Esperanza, las Angustias, Los Ángeles, Santo Descendimiento y Flagelación, y la Agrupación Musical Santo Tomás de Villanueva.
No quisieron perderse el acto las cofradías del Encuentro. Ferroviaria de San Rafael Arcángel y Nuestra Señora de Alarcos, ni tampoco las hermandades del Cristo de la Piedad, Cristo de la Caridad, ‘Ave María’, Misericordia, Pilatos, Prendimiento, Jesús Nazareno, Oración en el Huerto de los Olivos, Soledad, Jesús Caído, Santa Cena, las Palmas, Cristo del Perdón y las Aguas, Dolorosa de Santiago y Coronación de Espinas.
Las Dulcineas y Damas manchegas portaron, así mismo, flores a la Virgen del Prado y los Pandorgos estuvieron acompañados por representantes de la defensa de la huerta murciana.