El hermano mayor 2020 de la Virgen del Prado, Carlos Oliver, abogado de Ciudad Real afincado en Vélez-Málaga, ha donado en este atípico año de pandemia un cuadro de la Virgen pintado por el artista malagueño Manuel Martín, su amigo, que lo ha acompañado en la puesta de largo pública de la obra.
Martín, que jamás había visto a la Virgen del Prado pero se define como religioso y “muy mariano”, le ha dedicado dos meses y medio de confinamiento a recrear la imagen de la patrona de Ciudad Real, que según dice le ha acompañado en esos meses oscuros. Tanto es así que dice estar “atrapado” por la Virgen del Prado, una imagen de la destaca su “fuerza, bondad y serena belleza”.
Con la Virgen y el niño como protagonistas, en el cuadro se aprecian también aires del sur, con flores típicas de los patios malagueños.
Todo eso lo ha querido transmitir en la pintura, que se ha presentado este viernes junto con los actos religiosos de la patrona de Ciudad Real, acompañado por Oliver, un “exiliado” de Ciudad Real pero muy vinculado a la Hermandad de la Virgen del Prado y al movimiento cofrade, además de por el presidente Francisco Pajarón.
El cuadro se exhibirá en la catedral
El cuadro donado por Oliver se exhibirá en la catedral. “La terrible y virulenta pandemia que nos azota ha oscurecido alegres amaneceres. Tengamos los ojos implorantes fijos en la Virgen del Prado, que a largo de los siglos ha ayudado y sigue ayudando a sus hijos a sobrevivir o a bien morir”, dice el hermano mayor de este año en el saluda que ha dirigido al resto de hermanos, 1.300 personas, la más antigua y numerosa de Ciudad Real.