El Balonmano Alarcos comienza este sábado su pelea por mantener la categoría en la División de Honor Plata Masculina. Y lo hará ante uno de los equipos más complicados del Grupo por la Permanencia, el Unión Financiera Oviedo. El equipo asturiano es el primer clasificado de este grupo y cuenta con 12 puntos en su haber. Por su parte, el Alarcos parte en esta segunda fase como séptimo con 9 puntos. El pabellón Vallobín de Oviedo será el escenario de este partido (19:30 horas).
Uno de los jugadores del equipo, Pepe Mora, sabe de la dificultad del choque y comenta que “sabemos que venimos de una racha un poco complicada de unos partidos que no hemos conseguido sumar puntos ni lograr la victoria. Por eso creo que para cualquier grupo humano, deportivo, eso pesa mucho, pero no queda otra que levantarse”.
El canterano advierte que cada partido es una final. “Todos somos conscientes de que cada partido que viene ahora los dos puntos son claves, y que no queda otra que sumar. Sabemos que hemos tenido una semana un poco atípica, con un descanso, que muchos de nosotros, los que son de fuera, se han podido ir a su casa, han podido descansar, desde el entrenador hasta la mayoría de la plantilla, y creo que eso nos ha servido bien para coger aire, afrontar como hay que afrontarlo, porque son finales, son batallas, hay que ir muerte con lo que nos queda, así que yo veo al grupo esta semana muy unido, con un cambio de chip y de mentalidad que creo que nos hacía falta, ilusionados y sabiendo que tenemos que conseguirlo por lo civil o por lo criminal”.
El equipo pecaba de algunos errores durante unos minutos en casi todos los partidos y Pepe Mora da cuenta de ella “nosotros sabemos mejor que nadie nuestros fallos y nuestros errores, que se ven muy bien desde fuera, pero nosotros también somos conscientes de que siempre había 5 o 10 minutos que en esta liga no puedes permitirte con ningún equipo, porque está claro que hemos peleado con todos los equipos que están arriba, y no sé si por pecar de inexperiencia, de juventud, de lo que hablábamos al principio, pero había 5 o 10 minutos que en cuanto pierdes la conexión a cualquier equipo no perdonan. Así que, hay que trabajar para que eso no ocurra y afrontar esta segunda fase de la mejor forma posible”.
Además, Pepe Mora resalta que ahora todos los equipos son rivales directos. “Sabemos que ahora mismo nadie está casi salvado y nadie está casi descendido, así que cada punto que tengamos va a valer oro. Ya sabemos que el año pasado, no me gusta hacer comparaciones, pero hasta el último partido no sabíamos si nos quedábamos en Plata o no nos quedamos y ojalá que este año no sea así, pero sabemos que va a ser muy difícil, que cada partido en cualquier sitio donde vayamos o cualquier equipo que venga, que sabe que es una final a vida o muerte, y tenemos que estar preparados. Ya no valen excusas, ya no vale lamentarnos al día siguiente, tenemos que ponernos manos a la obra ya y afrontar cada partido como si fuese el último”.
En cuanto al rival, Oviedo, el extremo señala que “sabemos que es un equipo que hasta la última jornada contra Villa de Aranda no sabían si estaban en la fase de ascenso o de descanso. Han ganado a grandes equipos que están en la fase de ascenso que juegan muy bien a balonmano, tiene un equipo súper competitivo y creo que es uno de los equipos que perfectamente podría estar arriba. Va a ser muy duro, es un pabellón que aprieta mucho y para empezar yo creo que podía ser uno de los peores rivales que nos podía tocar y encima fuera de casa, pero es lo que hemos dicho, no nos valen las excusas. Ya solo valen partidos para hombres y vamos allí con la mentalidad de sacar los dos puntos y empezar con buen pie y acabar con la racha mala que llevábamos”.
Por último y sobre el factor anímico de Oviedo de caer al grupo de la permanencia, Mora piensa que “no sé si es en un punto a favor para nosotros, pero el estar hasta el final y tener el caramelo ahí de la fase de ascenso y que te lo quiten al final sí que es verdad que es duro y el grupo tiene que estar preparado anímicamente para afrontar eso, pero yo creo que Oviedo es un recién ascendido y seguro también estaba en sus planes y yo creo que ese punto de presión de jugar en casa, de haber podido tener una fase de ascenso muy cerca, yo creo que ojalá y les pese, pero me parece que con el equipo que tienen y con los competitivos que son, eso no les va a pasar factura y vamos a encontrarnos ahí un duelo bastante bueno”.