Varias decenas de profesionales de Enfermería de diferentes servicios y Urgencias del Hospital General Universitario de Ciudad Real han solicitado oficialmente a las autoridades sanitarias que los doten de equipos de protección individual (EPI) homologados para tratar a enfermos de coronavirus, y que, además, sean sometidos a pruebas de diagnóstico.
Ha sido dentro de una iniciativa surgida en las últimas horas entre enfermeros, auxiliares y celadores, con la que han querido mostrar su hartazgo. En concreto, han inscrito en el registro del centro uno a uno copias firmadas de una carta dirigida a la Gerencia y a otros responsables del hospital, en las que denuncian la inseguridad y desprotección que, según han sostenido, sufren desde hace mes y medio.
“Sin siglas ni sindicatos”, Guillermo Rubio, en nombre de este colectivo, ha llamado la atención de la situación insostenible que viven, “cansados de que jueguen con nuestra salud” a la hora de trabajar diariamente en primera línea en uno de los centros sanitarios con más carga asistencial por Covid.19 de la región.
Plantean tres puntos reivindicativos en los que exigen equipos de protección individualizados (EPIs) “reales y homologados y no batas cubrecolchones”, que el material sea desechable de un solo uso y no reutilizable, y que realicen masivamente tests a todo el personal sanitario.
Al parecer, según este enfermero de la planta tercera del área de Traumatología, ahora dedicada a pacientes con coronavirus, los trajes con los que trabajan, en teoría para un solo uso, son lavados de manera rutinaria y llegan en un estado “lamentable” para su reutilización, “con desgarros y rotos, y en los que traspasan los líquidos”.
“Publican en prensa que llegan equipos de protección y nos dicen que están homologados, ha agregado, pero vienen en bolsas transparentes, sin sellos y sin nada, y queremos saber quién los certifica”.
Son deficiencias ya denunciadas a sus supervisores, según ha dicho, por parte de los sindicatos, “sin respuesta”, y que los han llevado a vivir una situación al límite por la “carga física y psicológica que sobrepasan lo humano”.
La iniciativa ha sido respaldada por los profesionales enfermeros y además de este primer grupo que han salido a las puertas del hospital a realizar su denuncia copia en mano de la carta, se sumarán otros compañeros que no han podido realizar de manera personal el registro del escrito por estar realizando tareas insoslayables, por descanso o por estar cumpliendo con los 14 días de aislamiento.
También los trabajadores de la planta de Neumología apoyarán de manera conjunta, según el sanitario, la iniciativa en las próximas horas.
“Hay libertad a la hora de firmar la carta”, ha señalado Rubio en presencia de otra sanitaria que, en la misma línea, se ha mostrado favorable a utilizar los equipos que reciben “si certifican que están homologados por el Ministerio de Sanidad”. De esta manera “ni mis compañeros, ni mi familia, ni yo sufriremos ningún tipo de agravio”, ante la “evidencia” de que “llevamos casi dos meses atendiendo a pacientes con coronavirus, y la carga viral que hay es alta”. “Queremos trabajar con seguridad y con equipos homologados”, ha sostenido.
El Gobierno regional prioriza la seguridad de sus profesionales
Por su parte, fuentes de la Consejería de Sanidad han asegurado que están realizando todas las gestiones necesarias para que no haya desabastecimiento y para priorizar la salud de sus profesionales.
“Estamos trabajando para que todos los profesionales tengan los equipos de protección adecuados y que estén homologados”, han señalado.
“El Gobierno de Castilla-La Mancha siempre ha priorizado la seguridad de sus profesionales y seguirá trabajando en esa dirección”, han reiterado.
De la misma manera, y ante las tensiones en la compra de material sanitario, han recordado que el mercado “es convulso, y se ha convertido en un mercado persa”.