Son 25 años a golpe de tambor y son de corneta. Se celebraron este domingo con el tradicional concierto previo a la Semana Santa y ante su público. La banda daimieleña, que estrenó la marcha ‘Amor Despojado’ dedicada a su homónima gaditana, también rindió homenaje a cinco de sus integrantes y a tres habituales colaboradores de la formación musical. Los sevillanos Nuestra Señora Sol actuaron como banda invitada, informa el Ayuntamiento de Ciudad Real.
El domingo hubo más que redoble de tambores. Fue en el Pabellón Ferial. Se contaron más de 300 entradas. Suele ocurrir en el concierto previo a Semana Santa de Daimiel. Sin embargo, esta ocasión fue aún más especial. Los 25 años de la fundación de la Banda de Cornetas y Tambores del Santísimo Cristo de la Amargura se festejaban con esta cita tras un intenso año conmemorativo en el que de su estandarte también pende el reconocimiento municipal con la Medalla de Honor Ciudad de Daimiel.
Además, se estrenaba la marcha ‘Amor Despojado’ compuesta por Juan Carlos Martín-Consuegra, uno de los directores musicales, y dedicada a la hermandad gaditana Nuestro Padre Jesús del Amor Despojado a la que la formación damieleña acompañará el Domingo de Ramos.
El Pabellón se silenció ante los primeros redobles del concierto. Los anfitriones subieron al escenario haciendo gala de su fuerza a ritmo de tambores, cornetas, cornetines, trompetas, trombones, tubas, bajos y campanas tubulares. Era el primer examen a prueba después de semanas de ensayos. Incluso minutos antes, se repasaba la composición a las puertas del recinto.
La puesta de largo estaba pensada al milímetro; hasta se estrenaba batería nueva después de meses de proyecto. Y un equipo de rodaje tomaba recursos audiovisuales de los 71 integrantes daimieleños mientras tocaban la Sentencia, La Crucifixión, Lanzada, Amor Despojado (estreno), Flagelación y Misericordia del Padre (Triana). Seis piezas a las que se sumó un bis, a petición del público.
Se sellaba el “compromiso” con este evento para unas bodas de plata que evidencian el paso generacional, como comentaba el director de la banda, Antonio García-Maroto, quien también remarcaba las “ganas de continuar” y la “calidad humana” de los integrantes.
Antes del relevo, se entregó una placa conmemorativa a la banda andaluza. Los encargados de hacer los honores fueron el propio presidente de la cofradía del Santísimo Cristo de la Columna y Nuestra Señora de la Amargura (Los Coloraos), Carlos Fernández de Marcos, y la concejal de Festejos, Alicia Loro.
Esos instantes permitieron igualmente reconocer el compromiso con el ‘Cristo de la Columna’ para los músicos Alberto Romero Adrada, Miguel Martín Valero y Manuel Rodríguez-Bobada García-Muñoz por sus 10 años en ella. Al igual que ocurrió con Javier Martín-Consuegra Becerra, por sus dos décadas en la misma, y con Antonio García-Maroto Silva, al que se le reconoció sus 25 años de trayectoria. También hubo una mención especial a la familia Rodero-Serrano por su colaboración y al presentador Pepe Ayuga.
Cumplida más de una hora, llegó el turno de la formación sevillana de la Banda de Nuestra Señora Sol, con un recorrido que arrancó en 1975. Esta fue su primera visita a Daimiel tras una turné que le ha llevado por otros puntos de la provincia, como explicaba José Pardiñas, director y presidente de la asociación, quien subrayaba la vinculación que atesora este tipo de agrupaciones.
Los últimos estrenos de la Cuaresma 2024 sonaron para la ocasión sobre un escenario listo para sus 136 componentes, los cuales repicaron, Ecos de Pasión y Por Sevilla, además de las peticiones de Rosa Arenal y El Conjuro, junto a algún tema de los últimos años.
Se cumplió así con un concierto que fue seguido de cerca por algunos miembros de la Corporación Municipal y representantes de la Junta de Hermandades, además del que será el próximo pregonero de la Semana Santa de Daimiel el próximo sábado 23 de marzo, Ricardo Fernández del Moral.
