La Confederación Hidrográfica del Guadiana y las principales organizaciones agrarias, Asaja, UPA y Cooperativas Agrolimentarias, se dan otro oportunidad para entenderse en la futura planificación hidrológica de la cuenca, en la que la discusión, a meses para que se apruebe el nuevo plan hidrológico del Guadiana (posiblemente en otoño) gira en torno a lo mismo: los datos en lo que afecta al nivel y la capacidad de recarga de las masas centrales del Alto Guadiana (Mancha Occidental I, Mancha Occidental II y Rus-Valdelobos), antes acuífero 23.
La Confederación estima que el vaciado de este enorme mar subterráneo que se asienta sobre todo en el subsuelo de la provincia de Ciudad Real ha experimentado una merma de unos 1.500 hectómetros cúbicos respecto a su nivel óptimo, agravada en los últimos ocho años de menos lluvias y mucho consumo. En base esto “y a que todos los estudios incluidos en la planificación avanzan en que habrá menos aportaciones en las próximas décadas”, ha explicado el presidente Samuel Moraleda, se han hecho los cálculos en los que se basa ese plan.
No hay más restricciones en el periodo 2022-2027
Moraleda, que ha hecho de anfitrión de la reunión técnica en la comisaría de aguas de la Confederación en Ciudad Real, ha explicado que en el periodo 2022-2027 en el ámbito de aguas subterráneas se mantienen los mismos recursos que en el anterior plan.
Al encuentro, este martes en la comisaría de aguas, la Confederación ha llevado al catedrático de ingeniería hidráulica Jaime Gómez Hernández, profesor de la Escuela de Caminos Canales y Puertos de la Universidad de Valencia, y uno de los científicos más reconocidos a nivel mundial en cuanto al ámbito de la hidrogeología.
“Necesitamos un estudio nuevo”
Pero los representantes de las organizaciones agrarias siguen sin ver claros los datos, hablan de “errores en los cálculos”, que esperan que la Confederación subsane si se demuestra que sus estimaciones, “hechas por científicos de la Universidad de Castilla-La Mancha”, dice Arturo Serrano, secretario general técnico de Asaja, son más acertadas.
“Tenemos que tener una seguridad y una certeza en el recurso disponible para planificar las campañas. Los datos que obtenemos son diferentes que los del borrador del plan hidrológico de cuenca del Guadiana”.
UPA pide “cogobernanza”
Julián Morcillo, secretario general de UPA Castilla-La Mancha, ha agradecido a la CHG la oportunidad de seguir debatiendo (se reunieron en febrero) y pide “seguir avanzando en la cogobernanza, en la que los regantes nos impliquemos en la gestión del agua, y para eso necesitamos tener los datos claros”.
“Nos preocupa la estimación de los recursos disponibles en las masas de agua y estamos dispuestos a que esta mesa no sea flor de un día y termine con la aclaración de las dudas”, ha declarado al inicio de la reunión.
Morcillo ha puesto el acento en la importancia que tiene la agricultura para economía de Castilla-La Mancha, “300.000 hectáreas de regadío están en el Alto Guadiana, el 60% del regadío de la región, lo que ocurra en el Alto Guadiana es muy importante para nuestra economía”.
El estudio de Cooperativas Agrolimentarias
El estudio al que se aferran los agricultores y sus representantes lo elaboró Cooperativas Agroalimentarias, que han participado este martes en el encuentro representadas por Juan Miguel del Real, que ha celebrado como “una buena noticia” que se ponga en marcha este espacio de encuentro y debate. “El informe que encargamos a la Universidad de Castilla-La mancha se ponía de manifiesto errores y deficiencias en los datos, esas dudas se trasladaron a la administración, que a día de hoy no las ha resuelto. No podemos construir un plan sobre las dudas de veracidad”.
Agricultura, el sector estratégico de Castilla-La Mancha
Después han seguido hablando con expertos de otras universidades, “tenemos bases sólidas sobre las que discutir y después de saber cuál es el recurso disponible aplicar las medidas que haya que aplicar en la planificación. Lo que pedimos es que si se demuestra que esos datos son mejorables se pueda modificar la planificación que está sobre la mesa”. Del Real ha hecho hincapié en lo mucho que se juega Castilla-La Mancha en esto, “la región depende del agua, somos el sector más estratégico. Tenemos que luchar”.
Que las decisiones de tomen de forma participativa
El contrapunto en la reunión lo ha puesto José Juan Fernández, director general de Desarrollo Rural de la Consejería de Agricultura, que se ha referido a la importancia de que las organizaciones agrarias y los técnicos de la Confederación del Guadiana se sienten juntos, “es la mejor manera de que el sector agroalimentario participe en la toma de decisiones, puesto que es el mayor usuario del agua”.
La Junta está con el sector y cree que con modernización de regadíos y uso racional y eficiente del agua, además de la Tubería de la Llanura Manchega, diseñada para reforzar el abastecimiento humano en las poblaciones que dependen de aguas subterráneas en el Alto Guadiana, puede servir para compatibilizar todos los usos del agua.
En la reunión técnica han participado también el hidrogeólogo Pedro Rincón, el abogado Francisco Delgado y José Jaime Gómez Hernández, de la Universidad Politécnica de Valencia.