El Fiscal Jefe de Castilla-La Mancha, José Martínez, ha avanzado este miércoles que, según los datos aún no publicados de la Memoria 2017, durante el pasado año se produjo un retroceso del 12% en el número de procedimientos penales en la provincia de Ciudad Real, siguiendo la tendencia iniciada el año pasado, y por encima del descenso en Casrilla-La Mancha que fue del 8%
Martínez, que ha presidido en Ciudad Real la Junta de Fiscales Jefes de Castilla-La Mancha –que se celebra dos veces al año de forma itinerante- ha avanzado algunos de los datos contenidos en la Memoria de la Fiscalía que se hará pública en septiembre durante la apertura del año judicial, como que Ciudad Real acumula el 28% del trabajo penal de la región y que el número de diligencias previas por habitante supera a la media de la región, aunque se ha producido un descenso del número de juicios rápidos y se ha incrementado el número de sumarios.
Asimismo, ha explicado que analmente en Castilla-La Mancha se dictan un total de 6.000 sentencias 5.800 en juzgados de lo Penal y 275 en las audiencias provinciales, de las que más de un tercio –unas 2.200- son de conformidad “ya que, de lo contrario, no habría podido dictarse tal número de sentencias”.
No obstante, Martínez ha recordado que del total de esas 6.000 sentencias, el 75% son condenatorias, por lo que considera que aún hay margen para seguir utilizando esta herramienta que favorece a las defensas y las acusaciones, por lo que este ha sido uno de los temas principales de la reunión a la que han asistido todos los fiscales jefe de la región, encabezados por el de Ciudad Real, Luis Huete.
“Vamos a coordinarnos todas las fiscalías territoriales y mantendremos contactos con los colegios de abogados de toda Castilla-La Mancha para explicarles las posibilidades y cómo va a trabajar la Fiscalía para tratar de alcanzar más acuerdos que agilicen la justicia, evite la asistencia de testigos, con la molestia y preocupación que a veces les supone- y de los peritos.
Falta de fiscales
No obstante, esos datos no minimiza la importante necesidad de Fiscales que existe en Castilla-La Mancha y, especialmente, en Ciudad Real “donde hay un volumen de trabajo muy importante” ha señalado José Martínez, quien ha recordado que la UE hay 10 Fiscales por cada 100.000 habitantes mientras que en España son 5 y en Castilla-la Mancha 3,6, “por lo que Ciudad Real debería pasar de 22 a 26 y Castilla-la mancha de 85 a 100”.
A este respecto, es cierto que ha recordado que la comunidad autónoma tiene unas cifras de criminalidad bastante bajas, si bien ha destacado que los habitantes de la región tienen derecho a tener el mismo número de fiscales que en otras zonas, ya que no sólo trabajan en los juicios sino también en otros procedimientos como divorcios, tutelas…
También se ha hablado del funcionamiento de la Oficina de la Fiscalía en Cuenca ya que, debido a los cambios en el Ministerio de Justicia, desconocen si se seguirá el calendario previsto de implantación en el resto de provincias o ya se esperará al verano.
Otras cuestiones abordadas han sido las medidas adoptadas tras la entrada en vigor del Reglamento General sobre Protección de Datos; la organización de vacaciones de Fiscales y funcionarios del entorno de la Fiscalía Digital (Albacete Ciudad Real, Guadalajara y Toledo); control de los plazos previstos en el artículo 324 LECrim a través de las aplicaciones informáticas (Albacete); Organización de la Oficina Fiscal (Ciudad Real); balance de la reunión de Fiscales Jefes de El Escorial; y otras comunicaciones oficiales.
Expedientes digitales
Cuestionado sobre los problemas que están generando los expedientes digitales, el Fiscal Jefe de Castilla ha subrayado que es “hay problemas” porque es una herramienta compleja sin olvidar que los expedientes de los procesos penales aglutinan muchos cocumentos muy variados -desde fotos a conversaciones telefónicas- “y eso hace muy difícil tener una herramienta informática que soporte tanto peso y volumen, por lo que el proceso de acoplamiento es complicado y no termina de funcionar bien”.
Sobre este tema, Luis Huete ha añadido que, a su juicio, el problema principal es que existan dos aplicaciones diferentes, una para los fiscales y otra para los juzgados, “cuando debería ser una herramienta única”, ha concluido Luis Huete.
