Buenas tardes.
Acabo de leer tu crónica y no es que no acepte las críticas, todo lo contrario, ¡pero las hay constructivas y destructivas!
Quería simplemente aclararte varias cosas.
Y empiezo con esta.
Julio César, no es poco que un Ayuntamiento de poco más de 1.000 habitantes se aventure a dar una corrida de toros, la máxima expresión artística en el mundo del toro, cuando hay pueblos de más de 10.000 habitantes, e incluso capitales de provincia, que solo dan charlotadas y vaya por delante el máximo respeto a las mismas.
Eso es lo que debería ser noticia, no si la plaza estaba regada o no estaba regada que, dicho sea de paso, fueron las propias cuadrillas de toreros las que nos pidieron expresamente por la mañana que no se regara más y que se le pasará un rulo al ruedo. Y así se hizo, haciéndole caso a los que se juegan la vida en la arena: “la vida y la muerte”.
Aún así, a la hora de escribir la crónica se podría haber contrastado la información antes de publicarla hablando con alguno de nosotros. Pero bueno, eso es otro cantar y la mayoría de las veces todo tiene una explicación lógica.
Respecto a las fiestas patronales dudo mucho que cualquier municipio, y más del tamaño de Puebla de Don Rodrigo, pueda dar una corrida de toros fuera de sus fiestas patronales.
Fiestas patronales en las que doblamos la población, tenemos mil actos que llevar adelante y el mismo personal. En mi caso ahora mismo cuento con un encargado municipal y seis obreros de un plan de empleo de la Junta: eso para preparar las fiestas, limpiar, pintar y preparar la corrida de toros.
En lugar de ponernos a caer de un guindo lo que se nos debería es agradecer que colaboramos con el mundo del toro, no solo a Puebla de Don Rodrigo, sino a todos los municipios pequeños que realizan un esfuerzo colosal y sobrehumano para poder dar una corrida de toros.
Esto no es Toledo, ni Madrid, es un pueblo de 1.165 habitantes. Respecto a la entrada, fíjate el esfuerzo que realiza el Ayuntamiento para tenga un precio popular, 20 € para ser exacto, imagino que te darías cuenta cuando la compraste.
Sí, 20 euros por ver el festejo más caro que existe, para que pueda asistir todo el mundo, no solo el que tenga “perras”.
En algo sí estamos de acuerdo, ¡esto se va al carajo y poco a poco os vais a quedar más solos que la una!
Vamos a estar 8 días de fiestas mal comiendo, mal durmiendo y sin poder atender a la familia y amigos para que todo salga medianamente bien.
En eso es en lo que nos deberíamos fijar, en el esfuerzo que se realiza.
Un saludo!