La Policía Nacional de Ciudad Real y las empresas de seguridad privada que operan en la provincia, un abanico amplio que incluye desde vigilantes de seguridad a detectives privados, han sellado su buena sintonía y creciente cooperación en la comisaría provincial con la entrega de quince menciones honoríficas.
Cuatro de los premios han sido para los vigilantes de seguridad de Loomis, la empresa que cedió el furgón blindado decisivo como parapeto y auxilio a las víctimas (dos muertos y tres heridos) del francotirador con problemas de salud mental de Argamasilla de Calatrava (acabó abatido) en octubre del año pasado.
Con competencias de inspección y control de la seguridad privada, un sector laboral muy desconocido que emplea a ochocientas personas en la provincia, el comisario de la Policía Nacional Alberto Camacho ha destacado la cada vez mayor y mejor “captación, recepción y transmisión de información” que encuentran en estos colaboradores, con servicios muy destacados, como el de Loomis y otros con menos visibilidad pero también muy importantes para esclarecer delitos.
Combatir el intrusismo profesional
Combatir el intrusismo profesional “es una prioridad para la Policía Nacional”, ha dicho Camacho en el acto, y ha explicado que cada vez se hacen más inspecciones para detectar y sancionar a empresas y despachos no profesionales; incluso se ha desarrollado una línea específica de lucha policial contra el intrusismo en la seguridad privada.
La Policía Nacional también se ha marcado como objetivo potenciar la vía informativa y preventiva, con el objetivo de potenciar el conocimiento sobre el sector en instituciones tanto públicas como privadas, así como de la ciudadanía en general. El año pasado se hicieron 219 inspecciones y se pusieron doce propuestas de sanción a empresas y particulares que no cumplían la normativa de seguridad privada.
“Sois imprescindibles”
La subdelegada del Gobierno María Ángeles Herreros ha reconocido el trabajo de estas empresas, que poco a poco contratan a más mujeres (de los quince premiados este año tres han sido mujeres, una de ellas detective) aunque su presencia es bastante modesta en este terreno. “Sois imprescindibles”, les ha dicho a los premiados este año, a los que ha agradecido su labor para “complementar el trabajo de Policía y Guardia Civil”.
Desde empresas de explosivos hasta detectives
Las ochocientas personas que trabajan en seguridad privada lo hacen en empresas del sector en los ámbitos de instalación, transporte de explosivos, recepción de alarmas, transporte de fondos o centros formativos. También hay detectives privados, técnicos de alarma y operadores de central receptora de alarmas.
