Los trabajadores del Consorcio de Recogida Selectiva de Basuras (RSU) de Ciudad Real han logrado que desde este 1 de enero que la empresa les permita trabajar treinta y cinco horas a la semana y otras mejoras, en un acuerdo que se ratificará en unos días en el consejo de administración.
“Estoy satisfecho de que se haya logrado desconvocar la huelga en unos momentos del año tan señalados y de tanto trabajo en el servicio”, ha explicado este miércoles el presidente del consorcio y alcalde de Carrizosa Pedro Antonio Palomo.
Tras la asamblea que dijo “sí” a la huelga el domingo por un estrecho margen, y la negociación de la que salió la desconvocatoria in extremis, en muchas poblaciones los ciudadanos ni siquiera se han enterado de que lo que ocurría, y la normalidad ha sido la tónica en la recogida de basura de la última noche del año 2017 y la primera de 2018.
Elecciones municipales de mayo
La actual dirección de la empresa está dispuesta a asumir todo lo pactado con los sindicatos, que se plasmará en la negociación del nuevo convenio colectivo, pero tendrá que ser la asamblea general del consorcio, formada por representantes de la Diputación y los ayuntamientos, quienes decidan cómo se lleva a la práctica, con la nueva composición que salga de las elecciones municipales de mayo de 2019.
La implantación de las 35 horas en el RSU implica un incremento del presupuesto anual de un millón de euros y la contratación, en principio, de unos diez o quince trabajadores adicionales, en un año en el que de nuevo se había acordado una congelación de la tarifa de recogida de basura.
