15Valdepeñas cuenta con una de las mejores colecciones de arte contemporáneo gracias a las obras de destacados artistas que se han quedado en la ciudad tras participar en la Exposición Internacional de Artes Plásticas del municipio. Antonio López, Gregorio Prieto, Manuel López Villaseñor, Pancho Cossío, Agustín Redondela, Agustín Úbeda, Antonio Guijarro, Alfredo Alcaín, Juan Barjola, Venancio Blanco, Santiago de Santiago, José Luis Sánchez, David Lechuga, Juan Manuel Castrillón, Antón Patiño, Pedro Castrortega, Javier Garcerá, Antonio Rojas, Jesús Curia, Amaya Bozal, Gloria Merino, Óscar García Benedí, Adrián Carrá, Luis Feito, Calo Carratalá o Alejandro Botubol, entre otros muchos, son los artistas cuyas obras de pintura y escultura pueden verse en el Museo Municipal.
Han pasado 83 años desde que en 1940 naciera el certamen que ahora es el decano de cuantas convocatorias se celebran en el país, al ser el más antiguo y por su dotación económica. Un grupo de valdepeñeros, entre los que se encontraban José Guerola Sánchez-Moreno y el profesor Cecilio Muñoz Fillol, fundaron esta convocatoria que comenzó siendo local para pasar con los años a ser provincial, nacional e internacional, llegando en el año 2001 a obtener la Medalla al Mérito en las Bellas Artes, en la categoría de Oro, del Ministerio de Educación, Cultura y Deportes.
El certamen se ha celebrado de manera ininterrumpida durante estos años, con la salvedad de que, debido a la pandemia de la COVID-19, en 2020 hubo una edición especial de la exposición, que contó con obras de artistas ganadores durante la trayectoria del certamen que expusieron nuevas obras. No hubo premio.
Además de los premios, la exposición cuenta desde 1992 con un Fondo de Adquisición de obra, en el que varios mecenas aportan una cantidad económica para comprar obras entre las seleccionadas por el jurado (formado por artistas, críticos de arte y directores de museos y galerías). Administraciones como el Ayuntamiento de Valdepeñas, la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha o la Diputación Provincial de Ciudad Real, así como diferentes empresas son las que han instituido los premios o formado parte del Fondo de Adquisición durante estos años.
A la última edición del certamen se presentaron 309 obras de 255 artistas de 16 nacionalidades, entre las que resultó ganadora ‘Kids playing’ de Hugo Alonso.
Con las obras seleccionadas se realiza una exposición en septiembre, durante las Fiestas de la Vendimia y el Vino de la ciudad, que son las fiestas patronales en honor la Virgen de Consolación. La muestra suele contar con un artista invitado.
Poso cultural
Gloria Cerceda Cañizares, guía de museo e informadora turística, ha declarado a Lanzadigital que la exposición se ha mantenido en el tiempo por el poso cultural que hay en Valdepeñas respecto a pintores, escultores y mecenas; porque todas las corporaciones, independientemente del signo político, han creído en ella y la han apoyado; por su Fondo de Adquisición; y porque los ciudadanos la tienen muy arraigada.
Ha servido de inspiración a muchos artistas locales.
Cerceda indica que todos los autores de las obras que forman parte de la pinacoteca municipal son importantes, tanto los de las obras que se ven en una sala semi permanente, como los que no se ven. En este sentido, ha explicado que hay obras que se consideran “buque insignia” y que siempre están expuestas, como las de Gregorio Prieto, Antonio López o Pancho Cossío, y que otras van rotando.
Ha señalado que las obras se colocan por orden cronológico, acabando en un pasillo donde están las últimas obras premiadas.
A lo largo de los años, el nombre de los premios ha ido cambiando, así como la denominación de la exposición al cambiar la categoría de la misma.
La guía del museo ha hablado de algunas obras como la de “Los molinos de Consuegra”, de Gregorio Prieto, la más antigua expuesta, de 1953, una obra que es una defensa de la tierra del autor y de los molinos; o “Estudio de cabeza” de José Luis Sánchez, la obra más antigua de escultura. Ambas son el punto de partida de la exposición.
También ha hablado de obras como el “Desnudo en la playa” de Antonio López, premiada en 1959; la escultura de Venancio Blanco “Torero”, premiada en 1969; “Vuelta al campo” de Gloria Merino, “que muestra nuestras raíces, los colores de nuestra tierra”; “Personaje furtivo (para los toreros)” del pintor local Óscar García Benedí, premiada en 1989, una obra muy oscura; la escultura en mármol blanco “Germinal” de Adrián Carrá; una obra sin título de Luis Feito, que recuerda al vino por sus colores; obras de Calo Carratalá; “Gran eclipse” de Alejandro Botubol, primer premio tras la pandemia; “Hombre y mujer” de Manuel López Villaseñor, premiada en 1954; o “Figura sentada” de Joaquín García Donaire.
Puede verse figuración, paisajes, surrealismo, asbstracción…
Gloria Cerceda ha comentado que la exposición se fue profesionalizando y que hay obras ganadoras que quizá les cueste más digerir al público.
Además de las obras ganadoras del certamen y de las obras pertenecientes al Fondo de Adquisición, hay obras en depósito, que los artistas han cedido al ayuntamiento para que las exponga, como una del valdepeñero Antonio Crespo, “Red de aire”.
La guía del museo ha comentado que se pueden hacer visitas guiadas con diferentes hilos conductores destacando ciertas obras, como de desnudos, la juventud, el coronavirus y el confinamiento, el bullying…
La importancia de ser premiado o seleccionado
También ha apuntado que, aunque los artistas participan en el certamen con el objetivo de ganar el premio, también es muy importante para ellos que su obra sea seleccionada. Así pueden darse a conocer y consiguen que su obra sea vista por entendidos del arte como críticos y galeristas. Pueden ponerlo en su currículo y, además, su obra puede formar parte del Fondo de Adquisición.
Los museos, espacios vivos
Ha manifestado que uno de los objetivos de los museos es que sean espacios vivos, para lo que se organizan diferentes actividades para acercar el arte al público como exposiciones temporales de un artista contando con el propio artista para explicar su obra y su proceso creativo, en las que el público puede preguntar; la iniciativa “¡Vive tu museo!”, en la que se analiza una obra y al final de la sesión se hace una actividad, que en septiembre se centra en la exposición de Artes Plásticas; actividades con colegios y colectivos en las visitas, adaptando el lenguaje al grupo; jornadas de danza en el museo con motivo del Día de la Danza; maridaje o armonía entre el vino y el arte con motivo del Día del Enoturismo…
“Hacemos visitas a la carta para atraer al público. Animamos a solicitar visitas guiadas para grupos”.
Una maravilla de exposición
Gloria Cerceda ha declarado que la mayoría de los visitantes del museo que vienen de fuera no saben la colección de arte con la que cuenta. “Pocos saben que está aquí la colección de la Exposición Internacional de Artes Plásticas, salvo pintores y escultores que participan en el certamen o gente interesada en ver la muestra. Hay visitantes de Valdepeñas que vienen para ver los cambios que hacemos en la exposición. Los que no la conocen se sorprenden al verla y dicen que qué maravilla de exposición tenemos y qué poco se conoce. Hay quien viene porque ha visto el mural basado en la obra de Antonio López que hay en la plazoleta Balbuena de la localidad y quiere ver la obra original”.
“Tener una exposición de esta categoría en tu pueblo es algo anómalo. Propicia que muchas personas se interesen por el arte y se animen a pintar”. “Gracias a la Exposición de Artes Plásticas han surgido en Valdepeñas grandes pintores y artistas porque han tenido en su pueblo las últimas tendencias. También han surgido academias, talleres, nuevos grupos relacionados con el arte…”. “El pueblo se hace partícipe de la exposición. No es un mero espectador”.
Exposición sobre el coronavirus y el confinamiento
La guía del museo ha señalado que gustó mucho una exposición que se hizo con una selección de obras de la pinacoteca municipal con la temática del coronavirus y el confinamiento, “Volver a EmocionArte”, surgida a raíz de un vídeo que se hizo sobre ello y que pudo verse en las redes sociales del ayuntamiento. “La gente se emocionaba al final de la muestra porque se veía identificada con la historia que se contaba y que todos vivimos”: la llegada del coronavirus, las calles vacías, la gente en sus casas, la salida a los balcones… Dos de las obras elegidas fueron “El regreso del cazador” de Gonzalo Sicre (1997) y “Entre Foster y Gerhy” de Martín Ballesteros (1998). “El museo se cerró, pero seguimos trabajando. Contamos una historia a través de obras de arte. Muchos salían con lágrimas en los ojos al verla. El arte nos transmite y nos cuenta una historia”. “Las obras no tienen que gustar al que las mira, sino que tienen que generar algo: positivo o negativo. Si surge la reflexión, el arte funciona”.
Altavoz de la sociedad
Ha comentado que “la exposición se adapta a los tiempos. Evoluciona según las necesidades que surgen”. “La exposición es el altavoz de lo que pasa en nuestra sociedad. El arte plasma el ambiente. En estos 83 años se hace un recorrido por la sociedad, las tendencias y las modas. La riqueza de esta exposición es que es muy completa”.