Alicia Ruiz Romero, alumna del IES Bernardo de Balbuena, de Valdepeñas, ha obtenido la nota más alta en las pruebas de Evaluación de Acceso a la Universidad (EvAU) en la Universidad de Castilla-La Mancha (UCLM) con un 13,975 sobre 14 puntos al sumar la fase obligatoria y la voluntaria.
La joven pretende quedarse en la UCLM para estudiar Fisioterapia en Toledo, carrera que el año pasado tenía una nota de corte de 10,46 puntos, por lo que es más que probable que la alumna obtenga una plaza.
Alicia Ruiz Romero cursó el Bachillerato en el Instituto de Enseñanza Secundaria Bernardo Balbuena de Valdepeñas en la modalidad de Ciencias de Salud.
Se da la circunstancia de que, además, ha empatado en el primer lugar en cuanto a los mejores resultados de la fase obligatoria de la EvAU (sobre diez puntos) con Victoria Cano Gil, del Colegio La Enseñanza de Albacete, y que pretende estudiar Medicina. Ambas han obtenido 9,975.
Alicia Ruiz se ha mostrado muy contenta con estas notas en declaraciones a Lanzadigital. Ha manifestado que no se lo esperaba. “Salí contenta de los exámenes, aunque Lengua se me dio un poco mal. Pensaba que mi nota sería alta, pero no tanto, por lo que estoy muy contenta”.
La joven ha indicado que ha obtenido buenas notas en sus estudios, pero que estaba un poco nerviosa ante las pruebas de la EvAU, sobre todo, porque se había modificado el modelo de examen. Sin embargo, ha apuntado que los exámenes han sido más sencillos. “Los profesores nos prepararon bien y creo que el modelo de la EvAU por la COVID nos ha beneficiado a todos”.
Alicia ha comentado que, aunque ha estudiado, no lo ha hecho durante todo el día ni ha dejado de lado salir con sus amigos y de practicar sus aficiones como el ballet y el flamenco, para los que está yendo a una academia en Ciudad Real y espera examinarse de la Royal Academy of Dance, algo parecido a los exámenes de Cambridge, pero de la danza. “Si estás todo el día estudiando, no te lo aprendes bien. Es mejor descansar y desconectar”.
Ha indicado que segundo de Bachillerato ha sido complejo porque, “aunque el temario no tenía dificultad para mí, es mucha cantidad. En ESO podías examinarte de dos temas y ahora, por ejemplo, en Biología, ha habido 21 temas. Es un cambio radical, pero si vas estudiando durante el curso, es fácil. Te acuerdas de más cosas de las que piensas. Además, los profesores nos han ayudado mucho”.