El secretario general de Podemos Valdepeñas y candidato por este partido a la alcaldía de la ciudad, Luis Benítez de Lugo, y la portavoz del Círculo Podemos, Belén Campos, han ofrecido este lunes una rueda de prensa en la Plaza de España de la ciudad en la que han abogado por la participación ciudadana.
Benítez de Lugo ha dicho que “la oposición no está en el salón de Plenos. Los grupos políticos en el Pleno han sido tibios y han acompañado al gobierno en la legislatura. La oposición está en la calle. Nosotros tenemos propuestas constructivas, como la participación ciudadana. Con Podemos en el gobierno de Valdepeñas, la ciudad se convertiría en una localidad más transparente y participativa”.
Ha añadido que la formación morada podría gobernar en Valdepeñas mejor que el PSOE y ha criticado que “los partidos de la vieja política den premios, se hagan fotos, sonrían y entreguen subvenciones a los colectivos para sustentarse”. “Podemos es diferente y aboga por una democracia más participativa. Llama a la ciudadanía a participar en la vida pública”.
Benítez de Lugo ha asegurado que en Valdepeñas “la participación ciudadana es una burla”, como puede verse en la web municipal, que ha dicho que lleva 16 años estudiando hacer un reglamento de participación ciudadana.
En contraposición ha indicado que el programa de Podemos es verdaderamente participativo, con más de 60 propuestas. “El programa es nuestro contrato y allá donde Podemos gobierna aplica la participación”.
Ha comentado que el director general de Participación Ciudadana de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha, José Luis García Gascón, inaugurará este lunes a las 17 horas en el Centro de Juventud de Valdepeñas el primer curso de participación ciudadana de la campaña “Atrévete a participar”, y ha animado a los ciudadanos a asistir al mismo.
Por su parte, Belén Campos, también ha animado a asistir a este curso abierto, al que asistirá Podemos Valdepeñas. Ha declarado que en mayo la formación morada llegará al Ayuntamiento de Valdepeñas y dará una “vuelta de tuerca a la gestión municipal” haciendo suya la bandera de la participación, con unos presupuestos participativos, en los que los ciudadanos deciden donde gastar el dinero y con transparencia.
Ha abogado por un código ético para que los políticos limiten su mandato a ocho años y no cobren más de dos o tres veces el Salario Mínimo Interprofesional.
También ha señalado que “cuando a la gente se le permite decidir y votar, la apatía generalizada cambia y la inteligencia colectiva puede ser utilizada”.