La alcaldesa de Argamasilla de Calatrava ha mostrado su apoyo a los paros de mujeres convocados por las dos centrales sindicales del país el próximo 8 de marzo para, coincidiendo con el Día Internacional de la Mujer, dar visibilidad absoluta a las justas reivindicaciones de igualdad en todos los ámbitos de la vida, incluida la equiparación laboral y salarial o la erradicación de la violencia machista.
“Creemos que los sindicatos han estado muy acertados y lo apoyamos porque queremos poner en valor qué pasaría si ese 51% de nuestra sociedad se parara, pararan las madres, pararan las hijas, pararan las trabajadoras y pararan todas las mujeres”. Así lo ha referido Jacinta Monroy hoy, en la presentación de los diversos actos que, con motivo del 8 de marzo, va a desarrollar el Consistorio junto al Centro de la Mujer rabanero bajo el lema ‘Diversas e iguales, las mujeres mueven el mundo’.
Programación que arranca ya este primer día de marzo y que no solamente cuenta con el respaldo del Instituto de la Mujer, sino que el organismo público aporta contenidos para enriquecerla, tal y como ha explicado su directora provincial. Carmen Pimienta, junto a la concejala de Igualdad Laura Domínguez y la alcaldesa, han dado cuenta de toda la programación que volverá a mentalizar a la ciudadanía rabanera.
Monroy Torrico entiende que la crisis económica, además de lo que supone para la sociedad en general, arrastra consigo mayores desequilibrios en determinados campos, como la cultura o la educación y, en especial, en lo que a la equiparación real entre mujeres y hombres se refiere. Algo que viene buscando combatir desde la gestión que encabeza, mediante este tipo de iniciativas y de otras, porque “Argamasilla de Calatrava cree en la igualdad y lucha día a día por la igualdad en todo lo que puede aportar para hacerla toda una realidad”, ha asegurado la regidora.
Palabras que han sido valoradas por Pimienta, quien ha indicado como el Instituto de la Mujer también respalda todos los postulados de la huelga del día 8, recalcando que no la convoca el Ejecutivo autonómico, cuyo papel en todo caso será garantizar el derecho tanto de quienes quieran secundarla como de aquellas otras que no lo hagan, pero que no obstante los apoya.