La población en la provincia de Ciudad Real ha crecido un 0,19% durante los últimos años, en concreto durante el periodo comprendido entre 2000 y 2020. Así se desprende de los datos incorporados en la tercera actualización del Estudio sobre la Despoblación y el Despoblamiento en la provincia de Ciudad Real correspondiente a la página web d2cr.uclm.es, y cuyos resultados ha sido presentados esta mañana en una rueda de prensa en la que han intervenido la vicepresidenta primera de la Diputación provincial de Ciudad Real, María Jesús Villaverde, y los profesores de la Universidad de Castilla-La Mancha, Ángel Ruiz Pulpón, del Departamento de Geografía y Ordenación del Territorio, y Francisco Ruiz González, del Departamento de Tecnologías y Sistema de Información.
Durante su intervención Ángel Ruiz Pulpón ha señalado que el crecimiento de la población experimentado por la provincia ciudadrealeña durante las últimas dos décadas “viene asociado porque entre 2001 y 2008 hubo un importante crecimiento demográfico asociado a flujos migratorios positivos”.
En esta línea, el profesor del Departamento de Geografía y Ordenación del Territorio, quien ha aclarado que el último informe viene referido a la población y a sus características fundamentales, recogiendo datos de la situación demográfica de la provincia de Ciudad Real hasta el 1 de enero de 2020, justo antes de que comenzase la pandemia, ha comentado como durante los últimos cinco años la provincia de Ciudad Real pierde población, dentro de una dinámica que “es similar a lo que ocurre en otras provincias españolas de interior”.
Ruiz Pulpón ha añadido que para entender la situación demográfica de la provincia de Ciudad Real hay que tener muy en cuenta los macro indicadores demográficos que afectan a una España rural de interior como son una baja fecundidad y un alto nivel de envejecimiento.
Ha apuntado a su vez como dentro del saldo migratorio experimentado en Ciudad Real se aprecia como en los últimos años los habitantes de la provincia se han ido hacia la costa levantina, Madrid, Zaragoza y la zona costera de Andalucía, mientras que los que han venido a Ciudad Real procedían principalmente de la zona geográfica de la provincia de Toledo y de las áreas metropolitanas de Madrid y Barcelona.
Entre las localidades que más población han perdido durante los últimos 20 años se encuentran Valdemanco del Esteras, Solana del Pino, Villar del Pozo, Los Pozuelos de Calatrava, Villanueva de San Carlos, Puebla del Príncipe, Fuenllana, San Lorenzo de Calatrava, Guadalmez, Ballesteros de Calatrava, Anchuras, Alamillo y Almedina, según se desprende del estudio recogido por la página web d2cr.uclm.es.
Por su parte, entre las poblaciones que más población han ganado durante el periodo analizado figuran Tomelloso, Ciudad Real, Pozuelo de Calatrava, Miguelturra y Poblete.
También se ha referido a que el estudio ofrece multitud de variables y posibilidades, con dieciocho millones de registros con más de 560.000 valores recogidos, a lo que ha añadido que entre las principales novedades que recoge la actualización del estudio se encuentran la incorporación de las variaciones residenciales y las áreas de atracción migratoria.
Por su parte, Francisco Ruiz González, del Departamento de Tecnologías y Sistema de Información de la Universidad de Castilla-La Mancha (UCLM) ha explicado que el proyecto plasmado en la página web D2CR recoge cinco cuadros de mando principales que hacen referencia a los detalles demográficos de cada municipio, así como a los datos globales de toda la provincia. Por su parte, el tercer cuadro se centra en la demografía de las comarcas y los grupos de acción local, entre otros territorios intermedios, mientras que los dos últimos se basan en las migraciones y en los aspectos socioeconómicos de los distintos territorios.
Según ha indicado Ruiz González en España “existen otras herramientas para el análisis del reto demográfico, aunque ninguna al nivel tan completo como ésta. Las hemos comparado todas, y ninguna a nivel autonómico y estatal presenta la cantidad de indicadores de datos y de variables”.
Todos estos datos aparecen recogidos en el proyecto pionero a nivel nacional, plasmado en la página web D2CR, que cuenta con la financiación de la Diputación provincial de Ciudad Real, y que ha sido realizado por la Universidad de Castilla-La Mancha, con el esfuerzo del catedrático del Departamento de Tecnologías y Sistemas de Información, Francisco Ruiz González, y del profesor titular de Geografía Humana y director del Departamento de la Facultad de Letras, Ángel Raúl Ruiz Pulpón.
La vicepresidenta primera de la Diputación, María Jesús Villaverde ha indicado que el encargo del estudio responde a “una apuesta clara del residente José Manuel Caballero, y de la Diputación provincial de Ciudad Real para estudiar el fenómeno de la despoblación”, puesto que “sin él no podríamos ejercer unas acciones y unas políticas hacia este gran fenómeno que se produce sobre todo en las zonas de interior y que, por desgracia, refleja que estamos perdiendo población, Y gracias a todas esa motivaciones se pueden realizar unas políticas concretas para intentar paliar el problema o, por lo menos, no perder más población”.
A este respecto ha indicado que desde la institución provincial tienen claros dos objetivos como son los de “implementar políticas concretas en las poblaciones que están perdiendo población” así como el de “garantizar los servicios básicos de las personas que viven en esas poblaciones, pues aunque no podemos obligarles a que se queden, sí que podemos garantizarle una sanidad de calidad, una educación de calidad y un transporte de calidad, entre otros servicios”.
La vicepresidenta también ha recordado como en el último presupuesto la Diputación provincial de Ciudad Real se han invertido más de 14 millones de euros en políticas concretas para combatir la despoblación. En este sentido, se ha referido a la empleabilidad de los jóvenes con el programa Reto y de otros colectivos demandantes de empleo, con la iniciativa Promueve. También ha hablado que desde la institución provincial se garantiza la comida a los mayores en poblaciones de menos de 2.000 habitantes, y se han impulsado proyectos de eficiencia energética y sostenibilidad con una inversión de 35 millones de euros.
