Randstad, la empresa de recursos humanos número 1 en España y en el mundo, ha llevado a cabo un análisis sobre la evolución del mercado laboral en el sector turístico con motivo del Día Internacional del Turismo, que se celebra este viernes 27 de septiembre. Para ello, ha tenido en cuenta los datos publicados por el Ministerio de Industria Energía y Turismo, correspondientes a los meses de junio, julio y agosto desde 2008.
Randstad destaca que la afiliación en el sector del turismo en Castilla – La Mancha lleva seis años ininterrumpidos de crecimiento, superando este verano los 50.800 profesionales, la mayor cifra de la historia.
En concreto, la afiliación media se ha situado en 50.816 trabajadores. El volumen -promedio de ocupados durante los meses de junio, julio y agosto-, de este año en la región registró con respecto a 2018 un incremento del 4%, dos décimas por encima de la media nacional (3,8%), y un 22,2% más que en 2008.
Seis años de incrementos
Analizando la serie histórica, se detecta que, hasta 2013, se alternaron años de aumentos y descensos, sin superar crecimientos del 1,3%. Desde entonces, se encadenaron seis años de incrementos, con tasas de entre el 3 y el 5%.
A nivel nacional, la afiliación en este sector se ha situado en 1.868.290 trabajadores, cifra también récord y que encadena diez años de crecimiento. Un volumen que fue un 3,8% mayor que en 2018, cuando se registraron 1,8 millones de ocupados, y un 29,9% más que en 2008 (1,4 millones).
Los porcentajes de crecimiento reflejan el buen estado de salud del sector en el conjunto del país. Desde 2014, se encadenaron cuatro ejercicios de incrementos superiores al 4%, hasta que en 2018 se produjo una moderación en el crecimiento, registrando un 3,1%. En 2019, el crecimiento ha vuelto a incrementarse, hasta alcanzar el 3,9%.
Este no es el único indicador positivo del turismo en España. Según los datos del Instituto Nacional de Estadística (INE) y de su encuesta de movimientos turísticos en fronteras, desde enero a julio de este año 71,2 millones de turistas visitaron nuestro país, lo que supone un incremento del 1,9% respecto al mismo periodo de 2018.
Restauración
Los servicios de comidas y bebidas suponen el grueso del sector turístico, ya que tres de cada cuatro empleados (1,4 millones) pertenecen a esta actividad, experimentando un crecimiento del 3,7% en el último año. Los servicios de alojamiento registraron cerca de 413.000 empleos (22,1%), experimentando el mayor crecimiento del sector, un 4,3%. Por último, el 3,7% (68.517) trabajan en agencias de viajes u operadores turísticos, negocios que crecieron un 3,9%.
Según Luis Pérez, director de Relaciones Institucionales de Randstad, “el sector turístico supuso para nuestro mercado laboral un asidero al que agarrarse en los momentos más complicados de la crisis económica. El esfuerzo llevado a cabo en la profesionalización y digitalización de las compañías del sector, sumado a las magníficas infraestructuras e instalaciones con las que contamos en España, nos permite batir año tras año récords históricos de afiliación”. Luis Pérez subraya su convencimiento en que “todos los involucrados en este sector sigamos trabajando para generar oportunidades de calidad en uno de los principales motores de nuestra economía”.
Castilla – La Mancha, por encima de la media en crecimiento de la afiliación en turismo
El estudio también tiene en cuenta el número de afiliados según la comunidad autónoma. De este modo, Randstad destaca que todas las regiones han incrementado los ocupados en este sector, algo que también ocurrió en 2018.
Los incrementos más elevados que han producido en Andalucía (5,8%), la Región de Murcia (5,3%), Comunitat Valenciana, La Rioja (ambas con 4,6%) y Cantabria (4,5%). Por encima de la media nacional (3,8%) también se encuentran Galicia (4,2%), la Comunidad de Madrid, Castilla-La Mancha (ambas con 4%), Navarra y Extremadura (3,9%).
Ya por debajo de la media nacional se sitúan Catalunya (3,7%), Euskadi (3,5%), Aragón (3%), y Asturias (2,8%). Cierran la lista Castilla y León (2,7%), Baleares (1,9%), y Canarias (1,5%) como regiones con menor crecimiento en el último año.
En cuanto al volumen total de afiliados en el sector turístico, Andalucía vuelve a estar a la cabeza, registrando 322.910 profesionales. Cerca se sitúa Catalunya, con 316.040 ocupados, seguida por la Comunidad de Madrid, con 221.453, y la Comunitat Valenciana, con 197.782. Tal es su peso, que prácticamente dos de cada cinco profesionales dedicados al turismo en nuestro país trabajan en alguna de estas comunidades.
Un sector caracterizado por su diversidad
Los estudios de Randstad prevén que aquellas actividades relacionadas con el turismo seguirán demandando profesionales durante los próximos años. De hecho, este es un sector caracterizado por ofrecer una amplia variedad de oportunidades relacionadas con sus diferentes actividades relacionadas, como el comercio, el transporte de viajeros o las actividades de ocio.
En términos absolutos, los empleos de base, como por ejemplo camareros, mozos de habitación, camareros de piso, guías turísticos, ayudantes de cocina o cocineros, son los más solicitados. Aunque cada vez es más frecuente la búsqueda de perfiles intermedios o directivos, como managers, gerentes, jefes de sala o directores de hotel, con motivo de la alta especialización y profesionalización de este sector.
Además, la proliferación de herramientas digitales, como las redes sociales y su analítica, la Inteligencia Artificial o el big data, está provocando la demanda de perfiles especialistas en este tipo de tecnologías.
Idiomas, orientación al cliente y experiencia, habilidades propias del sector
Habilidades
Las características del empleo en este sector suponen que los empleadores soliciten determinadas habilidades comunes a sus candidatos. Una de ellas es, obviamente, el conocimiento de idiomas, debido al importante peso que los extranjeros tienen en el turismo que visita nuestro país. Asimismo, se detecta que además de idiomas tradicionales como inglés, francés o alemán, cada vez se demandan otras lenguas como chino, ruso o árabe, debido a la diversidad de orígenes que tienen los visitantes, y al incremento del poder adquisitivo de los turistas de estos países.
También es fundamental la orientación al cliente, ya que muchas de estas posiciones son de cara al público, por lo que a los candidatos se les exigirán habilidades al respecto, como amabilidad, empatía y capacidades comunicativas. Dada la estacionalidad y la temporalidad de estos trabajos, en muchas ocasiones se apreciará especialmente la experiencia en posiciones similares.
Por último, se demanda cada vez con mayor frecuencia que los candidatos cuenten con aptitudes digitales o dispongan de conocimientos de nuevas tecnologías, ya que es habitual que los profesionales se tengan que desenvolver con ellas en su día a día.
