En rueda de prensa, junto a la secretaria de Empleo del sindicato, Matilde Jiménez, Pedrosa ha destacado que de los datos de la Comunidad Autónoma se extraen “algunos aspectos positivos con respecto a España y otros más negativos”, como el hecho de que la tasa de paro de la región esté “todavía por encima del 16%, lo que duplica la tasa de paro previa a la recesión económica”, frente a la tasa nacional, que se sitúa por debajo del 15%.
No obstante, ha resaltado la disminución del paro “porque se ha producido con un ligero crecimiento de la población activa en términos anuales” de tal manera que “más gente ha demandado empleo y más gente ha encontrado empleo”, convencido de que “en un momento de enfriamiento de la economía, que sigamos creando empleo no es una mala noticia”.
Carlos Pedrosa ha reseñado que aunque el paro está dejando dos efectos, el “precariado”, en referencia a la gente que “rota permanentemente con contratos de días y semanas” y “los excluidos”, que son los parados de larga duración, estos últimos han “disminuido, aunque sea vía jubilaciones”, por lo que van “mejorando sus expectativas en materia de empleo”.
Guadalajara por debajo de la media del país
Analizando los datos con más detalle, el responsable regional de UGT se ha referido a la “excepción” que representa la provincia de Guadalajara, donde el mercado de trabajo “no ha sido capaz de absorber la demanda de empleo en los mismos niveles” pese a lo cual es, con un 11,69%, la “única provincia” de la región con una tasa de paro inferior a la media del país.
También ha citado la situación de las provincias de Toledo y Albacete, que “presentan un mayor problema de desempleo”, considerando que en ellas “no ha habido nada que sustituya el empleo perdido con la contundencia que necesita el mercado de trabajo”, y viendo “especialmente preocupante” la situación de la de Toledo, “donde ni siquiera el efecto frontera con otras comunidades autónomas está siendo capaz de provocar la bajada del paro”.
“Volatilidad” del mercado de trabajo
El dirigente sindical de UGT ha arremetido contra algunos datos que son “de lo peor” como el comportamiento de la industria en Castilla-La Mancha, donde el paro ha bajado pero se ha “perdido un porcentaje importantísimo de población activa”, y aunque ha destacado que “no es un sector determinante” en la región, “no aspiramos a que Castilla-La Mancha tenga un tejido productivo centrado en servicios, agricultura o construcción residencial”.
En último término, y tras demandar presupuestos a todos los niveles para “generar industria”, Carlos Pedrosa ha acusado la “volatilidad” del mercado de trabajo que evidencian los datos de la EPA, algo que “empuja de forma importante en España el crecimiento de las desigualdades”, por lo que ha reclamado al Gobierno regional “un cambio total” en las políticas activas de empleo y al Ejecutivo central “que lleve al Boletín Oficial del Estado aquellos aspectos de la reforma laboral de 2012 que están haciendo crecer la precariedad en el empleo”.
La secretaria de Empleo, de su lado, ha repasado los datos de Castilla-La Mancha comparándolos con los del cuarto trimestre de 2017 y el tercer trimestre de 2018, experimentando en ambos casos la tasa de desempleo una rebaja.
En el último trimestre del año, el número de personas desempleadas en la región bajó en 4.000, un 2,46%. El número de ocupados, al término del año pasado se situó en Castilla-La Mancha en 830.100, lo que supone 30.900 más.
Igualmente, se ha referido a tasa de paro de las mujeres, que se situó en Castilla-La Mancha en el 21,57%, el “doble”, según Matilde Jiménez, de la que registró la de los hombres, que fue del 11,89%.
