Nadie sale de casa, el BM Alarcos parece parado, pero no es así. El club mantiene a todos sus efectivos metidos en sus respectivos hogares. Directivos, jugadores, afición, canteranos… y todas las familias alarquistas en general, guardan la cuarentena salvo aquellos que, por obligaciones profesionales se ven obligados a seguir trabajando. Eso es lo que se ve, la normalidad dentro de la anormalidad de esta situación provocada por el coronavirus que tiene al mundo al ralentí esperando soluciones.
Pero hay más. El Alarcos es un club que no sabe estarse quieto, siempre está en movimiento pensando lo mejor para un proyecto llamado a ser Asobal. Así las cosas, mientras el virus mantiene a todos en jaque, la directiva ya plantea diversos escenarios de un futuro incierto que no quiere que le pille por sorpresa.
Para empezar, el equipo de comunicación del club continúa trabajando, moviendo en redes contenidos que hagan más llevadero el confinamiento a su gran familia. Se comparten entrenamientos de jugadores de todas las categorías, hay recuerdos y agradecimientos a los patrocinadores y habrá muchas más cosas que irá presentando en breve.
🎥 @javicruzgarcia luchando contra el 🦠 #Covid19
🙌🏻 Juntos podremos con él #yomequedoencasa #frenemoslacurva#aupaalarcos pic.twitter.com/WO2djINhHy— VESTAS BM Alarcos CR (@bmalarcoscr) March 16, 2020
Además, la directiva tendrá una reunión virtual la semana próxima para pensar en qué se puede hacer desde ya y en los distintos escenarios que se puedan plantear en el futuro. Lo cuenta desde su casa el presidente del club, Juan Pablo Marciel, que dice que “ante esta situación no podemos quedarnos parados y que el viento nos lleve. No ha sido nunca nuestra política. Estamos pendientes de una reunión con la directiva para tomar las medidas oportunas que se tomarán la semana que viene. Parados no estamos aunque no haya competición, estamos muy activos y la semana que viene comunicaremos las decisiones del club”.
“También esperamos –añade- por otro lado que desde las federaciones nos vayan indicando un poco cuál va a ser previsiblemente el camino que se vaya a tomar, porque nosotros podemos tomar decisiones, pero no que vayan a marcar el camino de la competición ni de la federación ni de nada”.
Y mientras el club plantea ya su futuro inmediato en los despachos, los jugadores siguen en sus casas trabajando, desde el más profesional al último en llegar a los benjamines.