Es lo que tiene ser campeón, que perder la primera eliminatoria, a pesar de dejarte con la miel en los labios, te brinda una segunda oportunidad. Una especie de reválida para los de Mario Simón que ahora gozan del privilegio de reengancharse a los play off en semifinales, donde se van a medir a un cuarto clasificado con la vuelta en casa, esa es la teórica ventaja de la que dispondrán los socuellaminos, que deben recuperar la moral y competir como saben hacerlo, como lo hicieron ante un conjunto del potencial del Mérida, solo que la suerte volvió a serles esquiva, esta vez en una tanda de penaltis que llegaba tras dos partidos y una prórroga de tremenda igualdad.
Es la segunda ocasión en menos de un año que tienen el ascenso tan cerca y lo vuelven a perder de la manera más cruel e injusta, por lo que lo principal de cara a esta eliminatoria ante el conjunto madrileño será el factor psicológico.
Por lo demás, se presentan dos partidos ante un conjunto rocoso como el C.D. Móstoles, dirigido desde el banquillo por un ilustre como Salva Ballesta, acompañado por un viejo conocido del fútbol castellano-manchego, Jovi, técnico de Almansa, Ibañés o Albacete B entre otros.
El conjunto madrileño llega a esta eliminatoria con la fecha hacia arriba, al revés que el Socuéllamos, pues viene de deshacerse en primera ronda de un segundo, el Peña Sport navarro, después de ganar en los dos partidos por la mínima y sin encajar, lo que deja entrever a la perfección las características de este equipo, que si bien no se caracteriza por tener un gran poderío ofensivo ni un hombre-gol definido, es complicado de batir y planteará una eliminatoria muy dura.
Lo que va a tener a favor el Socuéllamos tanto en la ida como en la vuelta será el público, pues si se da por supuesto el respaldo de la afición en casa, El Soto se convertirá este domingo en un pequeño ‘Paquito’ con 800 socuellaminos en las gradas según las previsiones, después de llenarse ocho autocares que la directiva ha puesto de manera gratuita para sus seguidores, con lo que los manchegos superarán en número a los madrileños también en la ida.
Mario Simón no podrá contar con Marc Sirera, expulsado en Mérida, con lo que se perderá la ida por sanción.
El colegiado del encuentro será el extremeño Muñoz García.