Cien años como garantes de la salud

El 8 de enero de 1918 el salón de actos de la Diputación Provincial de Ciudad Real acogió la constitución del Colegio Oficial de Médicos de Ciudad Real, una institución que este año celebra sus cien años como garantes de la salud y la sanidad pública.

Su actual presidente, José Molina, afirma que durante este siglo de existencia el Colegio de Médicos trabaja para ofrecer una garantía a los ciudadanos de que reciben la mejor sanidad posible y de que los médicos que están colegiados están en perfectas condiciones para ejercer la profesión. “Es el marchamo de calidad de esos profesionales que están actuando en la sanidad pública, pero no desde ahora, desde sus inicios”.

Los orígenes de esta institución colegial se remontan incluso antes de estos cien años, el 12 de abril de 1898, cuando a propuesta del entonces ministro de la Gobernación Trinitario Ruiz Capdepón, con el acuerdo del Consejo de Ministros, la Reina Regente Doña María Cristina sancionó un Real Decreto por el que se aprobaba el Estatuto para el Régimen de los Colegios de Médicos, en el que se establecía el carácter obligatorio de la colegiación médica.

Aunque es una época caracterizada por la inestabilidad normativa, sucediéndose reglamentaciones y modificaciones, la situación de colegiación potestativa y existencia de colegios locales y provinciales, estos últimos con reconocimiento de corporaciones oficiales, finaliza en 1917 cuando se vuelve a la colegiación obligatoria y se suprimen los colegios locales unificando todos en un solo Colegio por provincia.

Primera Junta

En 1918 se constituye el colegio ciudarrealeño y el primer presidente electo fue Julián Bonilla López, el secretario Alfredo Badía Fox, y el tesorero Manuel Messía de la Cerda Godoy. Como vocales fueron elegidos Francisco Recio y un representante por los médicos de cada distrito. Presidió el acto el inspector provincial de Sanidad, Federico Fernández Alcázar.

Como rememora José Molina, esta organización colegial y la obligatoriedad de la colegiación para ejercer perseguía organizar la profesión, defender el profesionalismo y, fundamentalmente, “defender al ciudadano, que es el principal destino directo y final de lo que nosotros hacemos”.

Para Molina un momento especial de la historia del Colegio fue en 1958 el hecho de poder disponer de unas instalaciones propias para su actividad administrativa, formativa y sus reuniones, las que disfruta en la actualidad en la Plaza de la Provincia. Hasta llegar a este punto se pasó por el domicilio del primer presidente, donde se celebró la primera sesión del Colegio, y algunos pisos alquilados, como en la calle Calatrava en el antiguo número diez.

El traslado a la sede actual fue fruto de las gestiones de Lorenzo Sánchez de León Serrano, (que fue alcalde de Ciudad Real en 1940) y que estuvo al frente de la institución colegial durante 24 años. El José María Navas Aguirre, secretario del Colegio de Médicos, solicitó en 1958 licencia para la construcción del edificio en la Avenida de Rey Santo, que fue inaugurado en 1961.

Evolución

Reflexionando sobre la evolución del médico en el último siglo, José Molina asegura que ha sido brutal. “Hoy en día sería casi irreconocible lo que se hacía antes”, rememorando a ese médico de pueblo o de una capital pequeña como Ciudad Real, con sus igualas, la atención de los avisos, su consulta… “Hoy en día los medios con los que cuentan los médicos son lógicamente mucho más avanzados. Antes se iba con el fonendoscopio, el tensiómetro y poco más, ahora contamos con electros portátiles, ecógrafos y se hace una medicina más sofisticada”.

Destaca Molina la profesionalidad de aquellos médicos, lo que le hace valorar todavía mucho más la preparación que reciben los profesionales actuales que salen de las facultades con mucha más práctica y conocimientos más profundos. Esto representa una pequeña muestra de que la Sanidad ha cambiado y al que se ha ido sumando el Colegio. “Antes lo que se hacía, por un lado, era apoyar la profesión y defender que el profesional estuviera cualificado. Hoy en día vamos más allá, ahora una parte importante de la actividad de los colegios es la formación, facilitar al profesional que siga al día proporcionándole cursos, seguimiento, actividades…”. En esta línea se va más allá en aras de esa garantía al ciudadano y el Colegio ahora también ejecuta la validación periódica de la colegiación, una certificación que avala que el profesional lleva una serie de años trabajados, que no tiene lacras o sanciones en la institución y, al mismo tiempo, cuenta con una aptitud psicofísica para la actividad profesional.

De 200 a 2.400 colegiados

En sus orígenes el Colegio de Médicos de Ciudad Real contaba con poco más de 200 colegiados, en la actualidad superan los 2.400. “Todavía somos un colegio relativamente pequeño, pero creo que es la medida justa”, considera Molina, quien aprecia la dificultad de contentar a todos en colegios con 40.000 colegiados como el de Madrid 40.000. “En este Colegio la relación es más directa y, por ejemplo, el personal administrativo se conoce a todos los profesionales de la provincia”.

En este sentido, la sede se encuentra en la actualidad en obras y una de las actuaciones es llevar los servicios administrativos a la planta baja, con acceso directo desde la calle, para dar mayores facilidades a los facultativos en sus gestiones con el Colegio.

Explica Molina que las obras eran ya una necesidad en una sede que no había sido reformada desde su inauguración hace casi sesenta años. Una de las actuaciones será la ampliación de su salón de actos y que contará con un estreno histórico al acoger, por primera vez en Ciudad Real, una asamblea de la Organización Médica Colegial a la que asistirán los responsables de la principal institución colegial de los médicos a nivel nacional, así como los 52 presidentes de todos los colegios provinciales del país.

A la hora de reflexionar sobre esos 200 médicos que ejercían hace cien años, Medina opina que debería ser una labor muy complicada la que desarrollaban tanto los propios profesionales como el mismo Colegio. La gran extensión de la provincia, con las comunicaciones de entonces, haría que médicos que estuvieran en pueblos tan lejanos de la capital como Anchuras o Almadén tendrían una relación nula con el Colegio. Hoy en día esto ha cambiado y gracias a la mejora de las infraestructuras y las nuevas tecnologías la relación es más directa. El colegiado está ahora más inmerso en vida colegial y cuenta con información periódica de todas las actividades que desarrolla la institución.

Núcleo del sistema sanitario

Reflexionando sobre el papel del colectivo médico en el sistema sanitario, afirma que es fundamental. “Sin él el sistema sanitario no existiría: es el núcleo”, argumenta el presidente de la institución colegial, que ejemplifica que al igual que los pilares que sustentas las casas, “en Sanidad el pilar básico es el colectivo médico, unos profesionales bien formados, comprometidos con su profesión, con la asistencia y con la sociedad”.

El compromiso del médico lo ejemplifica durante los últimos años de la crisis económica. Inmersos en una vorágine de disminución de plantillas, de sustituciones que no se realizaban, entre otros hechos negativos, para Molina el sistema sanitario aguantó e incluso evolucionó gracias al nivel de compromiso de los facultativos. Un hecho que la ciudadanía aprecia situando a los médicos como uno de los colectivos profesionales mejor valorados.

Al respecto Molina considera que el médico es una figura realmente respetada en la sociedad. Sin embargo lamenta que haya unas dramáticas excepciones que se presentan como agresiones, tanto físicas como psicológicas. Ciudad Real no es una excepción a esta “lacra” y también algunos profesionales de esta provincia han sido víctimas de agresiones. Para conocer en profundidad su alcance, el Colegio de Médicos envía cada año a sus colegiados una encuesta para que la contesten si se han visto afectados. Una encuesta que amplía las estadísticas que se elaboran a nivel nacional y da una imagen más real de estos sucesos que lastran la labor médica.

Para acabar con las agresiones, desde hace años el Colegio de Médicos trabaja en la campaña contra las agresiones Tolerancia Cero. En este sentido, Molina agradece que las administraciones públicas cada vez se estén concienciando más, como la firma de un convenio con la Fiscalía para emprender acciones más rápidas y directas, así como la consideración de las agresiones a médicos de atentado a la autoridad, por lo que los acusados tendrían una sanción mayor.

Del mismo modo el presidente de la institución colegial destaca la creación del interlocutor policial sanitario, impulsada a nivel nacional por el Ministerio del Interior, así como la creación por parte del Sescam del Observatorio de Agresiones, en el que está incluido el Colegio. “Son pasos firmes para ir en contra de estas situaciones que debemos erradicar, porque es un problema grave dentro de nuestra actividad”.

Actos del Centenario

El acto central del Centenario tendrá lugar el próximo 17 de mayo en el Conservatorio de Música de Ciudad Real. Contará con la asistencia de la ministra de Sanidad, Dolors Montserrat, y con una lección magistral del reconocido cirujano plástico Pedro Cavadas, con orígenes en Castellar de Santiago.

Algunos actos que ya ha realizado este año han sido una reunión conjunta con el Colegio de Farmacéuticos (próximamente se hará con los de Veterinarios y Enfermería) o un concierto solidario. Además ya está prevista una marcha cicloturista, un rally de coches antiguos y, a final de año, un acto de cierre en el que se presentará un libro con la historia del Colegio. A estos actos hay que sumar la reciente aparición del centenario en un cupón de la Once y la próxima aparición en un décimo de la Lotería Nacional.

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