El taller infantil ‘Teatronce. 80 años en escena’ organizado en el marco del Festival Internacional de Teatro Clásico de Almagro con el objetivo de favorecer el teatro inclusivo y de que niños de todas las edades comprendan lo que es una discapacidad visual, ha desbordado sus expectativas iniciales y de las 20 plazas inicialmente previstas se ha pasado a 31 niños de entre 8 y 14 años.
Impartido por un por un profesor de un centro de la ONCE en Puertollano, el Palacio de Valdeparaíso ha acogido esta iniciativa que se ha iniciado dando a conocer a los niños lo que es la escritura braille así como lo que se siente al caminar y vivir con la ausencia de uno de los sentidos como es el caso de la vista, para lo que los niños se han ido alternando con antifaces en los ojos y teniendo que confiar en otro compañero que hacía de su lazarillo.
A continuación, los menores han conocido lo que eran los romances o coplas de ciego, muy populares en su época, con raíces en la cultura popular y que se enmarcan en la llamada ‘Literatura de cordel’, similares en su métrica y estructura a los romances tradicionales y que solían caracterizarse por su selección de temas truculentos o sucesos insólitos.
Durante el taller, los participantes han tenido la ocasión de aprender, mientras se divertían y jugaban, algunos de los elementos básicos del teatro –la expresión corporal, voz, dramatización– aplicada a estos romances que servían, además, como instrumento de información y comunicación del pueblo llano de la época.
A partir de un romance en el que se narraban 80 años de la fundación de la ONCE y el trabajo que ha realizado desde entonces, los niños han podido desarrollar su creatividad e imaginación ya que han tenido que dibujar el cartel del que se ayudaban los ciegos en la época para explicar su historia para, posteriormente y en parejas, poner en escena este romance ya que mientras uno de los niños lo leía, el otro lo interpretaba como si fuera un ciego de la época marcando los dibujos que se correspondía con el texto.