La escritora rabanera, Anabel Ruiz, presenta ante sus vecinos la tercera de sus novelas: ‘Distancia entre dos mundos’, tras el éxito cosechado con ‘Amor tras el cristal’, que vio la luz el pasado año y de ‘Anoche soñé contigo’, con la que se estrenó como escritora, abriendo el camino de un estilo que habla de romanticismo, de aventuras y de personas que sueñan con fuerza.
Ésta que ahora presenta, considera la autora, “es una novela que nació de la necesidad de seguir contando”. De hecho, ‘Distancia entre dos mundos’, es la secuela de su última novela.
A veces el espacio y los silencios son tan necesarios, como lo es la necesidad de dejar fluir la creatividad cuando las ideas galopan por la mente, pidiendo paso. “Cuando presenté el año pasado mi segunda novela, no tenía pensado continuar con la segunda parte de una forma tan prematura, pero algo dentro de mí tenía la necesidad de salir y de cobrar formar y así, surgieron las primeras líneas de esta tercera novela que presento”.
Porque las cosas surgen, como el amor, cuando menos lo esperas; y así, las letras se solaparon sobre un teclado que pedía ser desgastado bajo la luz de una vela con olor a canela. “La empecé a escribir sin saber en qué iba a desembocar la segunda parte. A medida que iban pasando las páginas, me sentí atrapada y me sentía responsable de cómo iba a terminar por resolverse la trama para mis protagonistas”.
“Tenía tanta necesidad de escribir, que ha habido días en los que comer, descansar o simplemente conectar con la vida social me resultaba imposible”.
A veces surgía el agobio tratando de entrelazar la narrativa de una historia que fue creciendo día tras día. “Creo mucho en la magia que generan los personajes. Nace en mí una especie de conexión que me permite navegar en su psicología, en su forma de sentir y yo, como escritora, simplemente le voy dando forma en una historia que deja de ser mía, para que sea suya”.
En esa explosión de letras que ahora tiene forma de libro, ha vivido los últimos meses Anabel Ruiz, dando luz a la tercera de sus novelas, con la que no ha querido cerrar un círculo sino dar continuidad a eso que está construyendo como autora nobel.
“Como autora no quiero encasillarme en un género concreto. En estas primeras novelas la temática es el amor por encima de todo, pero creo que en cada una de ellas el proceso de madurez ha sido totalmente diferente”.
De lejos, otra historia viene tomando forma. Ya tiene título: ‘Quédate a mi lado‘ y ya tiene objetivo, contribuir con la Asociación Española Contra el Cáncer.
“Cuando a alguien le apasiona escribir, sentarse delante de un teclado, con una página en blanco, es una invitación a seguir creando y así está naciendo esta cuarta novela, de la que podremos ir contando cosas en los próximos meses”.
En estos momentos, no obstante, reconoce que “necesito respirar, llenarme de vida, de amigos, de instantes, porque son estos los que te empapan y los que inspiran nuevas historias, pero en mi cabeza esta nueva historia ya ocupa gran parte de mis pensamientos”.
