La única fórmula que funciona para combatir la precariedad laboral es “organizarse y luchar; hay que perder el miedo a hacerlo”. Esta es la receta que el sindicato Comisiones Obreras ha dado a los jóvenes que han participado esta tarde en la asamblea abierta con la precariedad laboral como asunto monográfico.
Víctor Manuel Arias, responsable juvenil del sindicato en la provincia, asegura que no es cierto que los jóvenes le den la espalda a los sindicatos de clase, al contrario, “en los últimos tiempos hemos notado un repunte a nivel nacional de afiliación de gente joven, de entre 18 y 20 años”.
Tener menos de 30 años en España es sinónimo de paro o trabajo precario que no da para emanciparse. Arias dice que no hay que resignarse, sino acercarse al sindicato y preguntar por sus derechos, “para que le orientemos y le propongamos cosas que hacer en su centro de trabajo”.
Apoyar a los trabajadores de limpieza
CCOO mantiene una idea básica y simple del sindicalismo: “luchar contra la precariedad de un trabajador es hacerlo por todos. Hay que apoyar y estar en cuantas protestas y concentraciones se promuevan, sea cuál sea el colectivo, como pasará mañana por el convenio de limpieza”.
La asamblea de hoy en la sede del sindicato en Ciudad Real es uno delos espacios de debate abierto hace dos años por CCOO, sindicato al que llegaron jóvenes universitarios recién licenciados y con pocas perspectivas laborales. Según Arias no es cierto que el mercado laboral haya mejorado en estos años de recuperación de la crisis económica, “y si lo ha hecho no ha sido por la voluntad de los gobiernos, sino por la lucha de los trabajadores”.
Asamblea de puesta en común el 30 de noviembre
La reunión de esta tarde, en la que se han presentado resultados del encuentro juvenil de junio en el parque de Gasset, tendrá continuidad el próximo viernes 30 de noviembre con otro encuentro de sindicalistas y militancia joven en el que participaran líderes sindicales que han conseguido importantes logros laborales luchando y revindicando.
Entre los participantes los “heroicos”, dice Arias, sindicalistas de Coca Cola y trabajadores de Vestas en Daimiel afectados por el cierre de la otra fábrica de la multinacional en León y el conflicto laboral planteado allí.