El Pleno del Ayuntamiento de Ciudad Real ha rechazado la moción presentada por el Grupo Municipal Ciudadanos en la que pedía la puesta en marcha de un plan de “desratización” en la capital provincial ante las diversas quejas de los vecinos por la presencia de roedores en las calles de la ciudad, “incluso en el interior de algunos comercios”.
El portavoz de Ciudadanos, Francisco Fernández-Bravo, ha instado al Ayuntamiento de Ciudad Real a que “inicie los trámites oportunos para encargar un análisis de diagnóstico respecto a la plaga de roedores en la ciudad, identificado, además, los factores medioambientales concurrentes, dando traslado del informe escrito a los diferentes grupos políticos”.
En este sentido, el portavoz de la formación naranja ha lamentado como “cada semana” los vecinos, a través de las redes sociales, denuncian la presencia de roedores por diversas calles de la ciudad.
Por su parte, la concejala del PP, Lola Merino, se ha sumado a las críticas de Ciudadanos hacia el equipo de Gobierno añadiendo que “no es un problema nuevo”, ya que, según Merino, “las ratas llevan campando a sus anchas más de tres años por Ciudad Real”.
La concejala de Medio Ambiente y Limpieza Viaria, Manuela Nieto, ha comentado que existe un informe del jefe de servicio del área de Limpieza del Ayuntamiento de Ciudad Real en el que asegura que “no es necesario realizar un plan especial, ya que el tratamiento que se aplica en la actualidad es continuo, haciéndose tres al año por las calles de la ciudad, además de uno especial en los centros escolares”.
En este sentido, la concejala de Medio Ambiente ha destacado que en la memoria de la Concejalía de Limpieza Viaria del año 2017 se contempla un total de 68 incidencias de plagas, de las que “una veintena era solo de roedores”, dando a entender que no es un problema desmesurado.
Finalmente la moción no ha prosperado por los votos en contra de los concejales del equipo de Gobierno y Ganemos.
El Pleno rechaza la moción de Ciudadanos para pedir “un control” en los locales de apuestas
El Pleno, con los votos en contra de todos los grupos políticos, también ha rechazado la moción de Ciudadanos en la que pedía realizar las modificaciones precisas en la normativa local sobre planificación urbanística con el objetivo de prohibir la apertura de casas de apuestas y juego en las proximidades de centros escolares, institutos, centros juveniles y edificios públicos con alto tránsito de menores de edad.
El portavoz de Ciudadanos, Francisco Fernández-Bravo, ha comentado que “somos conscientes de que existe una dispersión legislativa en materia de juego y conductas adictivas”, por lo que desde el Ayuntamiento se deben “utilizar las armas para proteger a nuestros jóvenes”.
El concejal de Urbanismo, Alberto Lillo, ha comentado que “la protección de los jóvenes nos preocupa a todos”, pero ha señalado que la ordenación del juego compete a la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha, por ello el equipo de Gobierno ha votado en contra. Así mismo, ha comentado que desde la JCCM se está trabajando en la elaboración de una nueva Ley del Juego de Castilla-La Mancha, que “intentará proteger a los jóvenes”.