La Confederación Hidrográfica del Guadiana atribuye a causas naturales, relacionadas con factores fisiológicos combinadas con cambios de temperatura y condiciones hídricas, la mortandad de peces detectada el domingo en el pantano de El Vicario en Ciudad Real.
No ha habido más muertes hasta este jueves, sólo las entre 30 y 40 de principios de semana, y los restos están en fase de descomposición para consumo de aves y otros carnívoros en zonas dispersas del pantano. “Debido a dicha dispersión y baja densidad no parece aún necesario enviar cuadrillas de retirada”, explican fuentes de la CHG.
Con los primeros resultados analíticos de las muestras de agua tomadas el martes por la tarde el organismo de cuenca asegura que los principales parámetros que se vigilan para la aptitud de la vida piscícola “están dentro de la normalidad y no serían causa de la mortandad (oxígeno disuelto, nitrito, amonio, cloro residual, pH…), tampoco hay constancia ni indico alguno de vertidos accidentales de aguas residuales”.
Esfuerzo reproductor y cambio de tiempo
Por todo esto “se refuerza la sospecha de mortandad natural relacionada con factores fisiológicos, de esfuerzo reproductor y edad, combinados con el cambio de tiempo y condiciones hidrológicas del embalse”.
La mortandad de peces no es masiva y está dispersa por El Piélago (inmediaciones del puente de Peralvillo) así como por los pesquiles de la margen derecha ya en zonas más próxima a la presa.
