Este 24 de mayo se han cumplido dos años desde que se celebraron las elecciones municipales que terminaron convirtiendo a Pilar Zamora en la nueva alcaldesa socialista de Ciudad Real, tras más de dos décadas de gobierno del PP.
La primera edil no duda en destacar que han sido dos años que comenzaron con mucha ilusión y que han continuado con mucho trabajo, “porque no hay que olvidar que somos 9 concejales en el equipo de Gobierno, con una dedicación exclusiva de 24 horas los 365 días del años”.
Sin embargo, para Pilar Zamora el balance no puede ser más satisfactorio porque cree que se ha pasado de la ilusión del cambio a la realidad del cambio, con hechos palpables como las obras en la Plaza de Cervantes, asfaltados en la calle o el Museo Elisa Cendrero que se va a abrir, entre otras muchas.
P.- ¿De qué se siente más satisfecha en estos dos años?
R.- Primero de mi equipo. Me siento muy orgullosa de los hombres y mujeres que conforman este proyecto y del trabajo que desarrollan cada día.
En cuanto a medidas que hemos tomado, podría citar que el Ayuntamiento ha dejado de ser un sitio cerrado para pasar a estar abierto a la ciudadanía y en el que existe participación, ya que la opinión de vecinos y colectivos se tienen en cuenta a la hora de tomar las decisiones políticas.
Pero también me siento orgullosa del cambio en las políticas sociales y de cada acción que hacemos para que la gente tenga empleo.
Y me siento muy feliz de pasear por las calles de Ciudad Real y comprobar el cariño y el respeto de los ciudadrealeños.
P.- ¿Cuál es el grado de ejecución de su programa electoral?
R.- No me gusta poner números ni porcentajes. Creo que, como dicen en el cole, progresamos adecuadamente.
Hemos avanzado, primero internamente, con logros como la fi rma del Acuerdo Marco con la unanimidad de los sindicatos para los trabajadores del Ayuntamiento, que han recuperado la acción social y, aunque siempre se pueda ir a más, lo cierto es que es un paso muy importante porque hacía muchos que no lo tenían.
Pero también podemos decir que estamos siendo muy valientes y un ejemplo son las obras de la plaza de Cervantes, que eran urgentes ya cuando gobernaba el PP pero no tuvieron la valentía de afrontarlas. Por eso nosotros estamos cumpliendo con la rehabilitación de la ciudad.
Cumplimos también con la cultura y, a través del Consejo de Cultura, las asociaciones y colectivos son los que deciden hacia dónde va la actividad cultural de la ciudad, igual que los colectivos sociales deciden hacia donde van las ayudas.
Y si hablamos de transparencia, también hemos cumplido ya que es absoluta gracias a medidas como que todos los grupos municipales están en la Junta de Gobierno Local, que participen en la Mesa de Contratación… Estoy especialmente orgullosa porque yo venía de una oposición para la que todo era opaco al 100%.
También hemos cumplido con las pedanías. No olvidemos que el colegio de Valverde se está haciendo ya o que el agua les llega igual a los vecinos de esta pedanía que a los de Ciudad Real; y Las Casas ha recuperado una línea de autobús, además de que vamos a hacer la vía verde y trabajamos en el pabellón.
Insisto, siento que progresamos adecuadamente, aunque también es cierto que cuatro años es poco tiempo y que lo que estamos haciendo es poner las bases de un gobierno que espero sea socialista durante mucho tiempo en el Ayuntamiento de Ciudad Real, con quien tenga que venir.
P.- Sin embargo, hay algunas voces críticas que apuntan que, a estas alturas de legislatura, aún no se ha notado un cambio importante entre la gestión del PP y la del PSOE. ¿Qué les diría para explicarles las principales diferencias?
R.- Cosas tan objetivas como que vean los talleres municipales o la plaza de Cervantes que ya son una realidad o que se pasen por cualquier consejo de participación.
Pero es que, además, la ciudad está más viva que nunca y hay una impresionante actividad cultural, hemos sacado a la calle los eventos para que los ciudadanos los disfruten, organizado competiciones deportivas de primer nivel…
Creo que soy objetiva si defiendo que no se puede decir que la Ciudad Real que tenemos hoy sea la misma gris y anodina que había con el PP.
Tenemos que hacer más cambios, es cierto, pero también es verdad que cambio es progreso no es ruptura, y por eso también respetamos y trabajamos por nuestro folclore, nuestra Semana Santa que es importantísima, o nuestra Pandorga, por cuyo nombramiento de Interés Turístico Nacional estamos trabajando que, aunque lo podían haber hecho otros, somos nosotros quienes lo estamos haciendo.
En definitiva, trabajamos por el progreso y desarrollo conservando nuestras raíces.
P.- Siempre ha dicho que el desempleo es una de sus ‘obsesiones’ para cuando el Plan Estretégico por el Empleo?
R.- En breve. En primer lugar tengo que agradecer tanto a la Junta de Comunidades como a la Diputación de Ciudad Real su apuesta por los planes de empleo, igual que nosotros pusimos en marcha otro con una cuantía económica que no se daba desde hace muchos años.
Pero es verdad que estamos trabajando con un nuevo IMPEFE, que no solo se trasladó a unas nuevas instalaciones, sino que está funcionando de una forma mucho más eficaz y, de hecho, en los últimos planes de empleo la media que tenía que esperar un ciudadano era de tres minutos para que se le atendiera.
También es importante hacer Ciudad Real atractiva para la inversión empresarial y lo estamos haciendo poniendo a la capital en grandes escaparates de eventos como FENAVIN, que fue un indudable éxito.
Pero es que también la IV edición de puntApunta de las motos BMW nos ha puesto en un escaparate internacional; igual que lo hacen los grandes eventos deportivos.
Queremos ser un polo de atracción empresarial porque estamos magníficamente comunicados y seguimos en esa línea de trabajo.
El nuevo Plan Estratégico va encaminado a que todas aquellas personas que no tengan un trabajo, tenga una oportunidad de formación, de reciclaje o de especialización, y de empleo. Lo que queremos es que todos los vecinos y vecinas de Ciudad Real se sientan parte de ese Instituto Municipal de Promoción Económica y Empleo, además de que vean que el Ayuntamiento busca una solución a las necesidades que existan.
P.- Ya que ha hablado de FENAVIN, la Diputación ha comenzado a hacer realidad esta semana el compromiso del presidente de la institución provincial, José Manuel Caballero, de adquirir terrenos para ampliar y mejorar el Pabellón Ferial, ¿qué le parece esta iniciativa? ¿Cederá el Ayuntamiento las parcelas que tiene en la zona?
R.- El anuncio es muy bueno para Ciudad Real porque las carpas se van cuando acaba la feria y el pabellón ferial no, por lo que permitirá afianzar la imagen de la capital como ciudad de congresos.
La colaboración entre el Ayuntamiento y la Diputación es absoluta y ya le trasladé al presidente de la institución provincial que cuente con nosotros al 100% cuando lo necesite.
Respecto a la cesión, es cierto que no tenemos una mayoría absoluta y que cualquier decisión tiene que pasar por un Pleno, aunque yo confío en la inteligencia del resto de grupos municipales porque sería un error si, por hacer una oposición demagógica, se impide el desarrollo de un pabellón ferial que llevamos tantos años reclamando unos y otros. Confío en que al final tendremos unas magníficas instalaciones que nos permitirán seguir creciendo.
P.- Uno de los momentos ‘complicados’ que le ha tocado vivir en esta legislatura ha sido el de las Pedregosas. ¿Cómo está la situación y para cuando el plan de innovación que avanzó como posible solución?
R.- Es verdad que ha sido uno de los peores momentos que he vivido en lo que va de legislatura porque fue ir al juzgado a que te notificaran una decisión muy dolorosa y de forma apremiante sin haber formado parte del proceso. Por eso nos hemos reunido con los vecinos una y otra vez y saben que siempre estoy dispuesta a volverlo hacer.
Ahora la mejor noticia es que no hay noticias desde el juzgado que es quien tiene competencias para tomar decisiones.
Todo aquello que esté en manos de la Junta de Comunidades seguirá adelante porque, si bien es cierto que el tema lo abordé con la anterior consejera de Fomento, aunque Elena de la Cruz ya no esté con nosotros, me consta que la nueva titular de esta área sigue en la misma línea y hablará con los vecinos para elevar un informe al Ministerio de Agricultura que es quien tomará la última decisión.
Yo apelo a los representantes del PP a que insten a sus compañeros a nivel nacional para que, cuando el tema llegue al Ministerio de Agricultura, se pongan de parte de los vecinos de La Pedregosa.
P.- Hay otros grandes temas que en estos dos años han ocupado muchos titulares como, por ejemplo, la Plaza de Cervantes. ¿Satisfecha con las obras?
R.- Sí. Es una obra muy complicada, de valentía, porque hemos tenido que cambiar todo el saneamiento y abastecimiento entre una gran maraña de cableado, encontrándonos situaciones como tuberías que no vertían en la red durante años sino en el terreno arcilloso provocando oquedades.
Insisto también en que es una obra difícil pero ningún vecino se ha quedado sin abastecimiento ni saneamiento, y en la que al principio se quejaban de que no veían máquinas trabajando pero es que para que entre maquinaria pesada antes había que afianzar el terreno porque desconocíamos la firmeza del terreno.
Y los plazos no nos importan tanto como la seguridad como objetivo prioritario, por lo que se van a afianzar los edificios. No obstante, vamos a buen ritmo porque el plazo es hasta septiembre ya que es una obra larga.
En este punto he de decir que soy consciente de que se están causando molestias a los hosteleros, pero es una obra que había que hacer y, cuando se termine, se darán cuenta no solo de que queda mejor estéticamente sino de que no se hunde.
P.- ¿Y cómo va el Torreón? ¿Habrá solución pronto y volveremos a ver el arco?
R.- Veremos el arco antes de que se acabe la legislatura, sin duda. Esa es otra de esas obras que el anterior equipo de Gobierno decía “lo vamos a hacer, lo vamos a hacer…” pero han pasado años y es el actual equipo de Gobierno el que va a recuperar el entorno para los vecinos y para todos los ciudadanos.
Queremos hacerlo con participación, porque ya hay colectivos que han hecho propuestas y nos gusta escuchar a todo el mundo como ya hemos hecho en la plaza del Barrio de los Ángeles y haremos en la de Cervantes. Pero lo haremos cuando hayamos cumplidos todos los trámites de conservación del patrimonio, que es algo muy importante.
Y sí, antes de que acabe la legislatura quitaremos esas vayas opacas que durante años han ocultado el arco del Torreón, algo muy diferente a las de la plaza de Cervantes donde todo el mundo puede ver lo que se está haciendo.
P.- ¿Para cuando un Plan de Ordenación Municipal como dijo en su discurso de investidura?
R.- Es muy necesario. Pero, como todo en este Ayuntamiento en la etapa pasada, se externalizó y se hizo un primer borrador sin sentido para una ciudad de 200.000 habitantes. Ahora lo que queremos es hacerlo con los trabajadores del servicio de Urbanismo, a quienes les quiero agradecer el gran esfuerzo que están haciendo para sacar adelante todas las obras que hay en la ciudad porque las Leyes Montoro están obligando a sacarlas rapidísimamente.
Ahora parece que nos va a aflojar un poco la presión, pero que nadie se apunte este tanto porque desde la FEMP, de la que formo parte, nos hemos estado reuniendo con el Gobierno para que al menos nos deje gastar en 2017 y 2018 los remanentes de 2016.
Ese es el motivo por el que, aunque sabemos que el POM es necesario, ahora mismo no es lo más urgente porque no podemos perder el dinero que se puede invertir en la ciudad de esos remanentes que hemos conseguido por nuestra buena gestión económica ya que el presupuesto de 2016 ya fue íntegramente de este equipo de Gobierno.
Ahora mismo estamos en asfaltar, hacer acerados, arreglar la plaza, cambiar el vaso de la piscina del polideportivo, sustituir el abastecimiento en la avenida de los Descubrimientos, concluir las obras del museo, intentar arreglar el Antiguo Casino, mejorar la accesibilidad del Quijano… No son pequeñas obras, sino obras que necesita la ciudad.
P.- Para finalizar, ¿qué le gustaría haber conseguido, que tenga aún pendiente, cuando acabe la legislatura? Y ¿cómo será la Ciudad Real de 2019?
R.- Confío en que sea una ciudad en la que los empresarios hayan invertido y así hayamos podido bajar las cifras de desempleo, ya que no le puedes hablar a los ciudadanos de cultura, deporte, o participación cuando no tiene empleo y su familia lo está pasando mal.
Además, no tendrá nada que ver con la de 2015 porque ni las calles ni los barrios estarán igual, que estaban desatendidos; la cultura ya no tiene nada que ver; y este Ayuntamiento será aún más transparente.
Confío en que sea una ciudad en la que queramos que nuestros hijos se queden.
En clave personal
1.- ¿Qué coste ha tenido ser alcaldesa de Ciudad Real? Perder tiempo con mis hijos aunque compensa porque ellos me ven feliz. Además, para ellos no es fácil pasear conmigo por la ciudad, más para el de 14 que es una edad complicada que para el de 8, porque yo me paro y hablo con la gente.
2.- Siendo alcaldesa, ¿por qué ha llorado? Por todo. Por lo bueno y por lo malo. Los pañuelos de papel me acompañan a muchos actos. Lloro de emoción con los niños, que me encantan, y me gustan mucho los dibujos que me hacen siempre con tacones. Lloro cuando recibo a un vecino que me pone un bebé en brazos y te dice que no tiene para pañales mientras lo miro y al final veo la cara de mis hijos; lloro en las bodas; en los acontecimientos deportivos… Lloro mucho, pero no voy a dejar de hacerlo.
3.- ¿Y por qué ha reído? También me río mucho. Tengo un gran equipo que trabaja mucho pero que también es una pandilla de amigos con el que reír al terminar un día complicado. Me río mucho con mi gente… En definitiva, me río mucho y eso no es un síntoma de que las cosas no te importe, al contrario, es de la ilusión con que trabajas. Pero me he reído más que he llorado.
4.- ¿Cómo lleva cuando recibe ataques personales que van más allá de usted y ‘salpican’ a su familia? Mal. En el ámbito político cada uno tenemos una idea de cómo gestionar el Ayuntamiento y aceptaré siempre las críticas desde la vecina que te dice que su calle está sucia hasta la de cualquier compañero en el Pleno que no haría las cosas como las hago yo. Pero, el insulto personal, que yo no he utilizado nunca ni lo utilizaré, que afecta a tu familia lo llevo mal. Para mis padres, por ejemplo, soy Pilar, no la alcaldesa, y cuando la crítica trasciende el aspecto político pues es duro ver el insulto a su hija. Mi familia lo lleva con mucha discreción, mi marido acude a los actos a los que le obligo porque él tiene su profesión, por lo que verse en un foco de críticas lo asume, pero me afecta a mi más.
5.- ¿Ser alcaldesa de Ciudad Real es lo que esperaba? Es lo que deseaba y por lo que trabajamos hace dos años con fuerza, ganas e ilusión. Yo sabía que esto iba a pasar porque veíamos cómo se iba ilusionando la gente y desapareciendo los miedos que otros se encargaban de difundir.
6.- ¿Cómo han llevado estos dos años en su casa? Con muchas ausencias. Yo cuando llego a casa trato de volver a ser la mamá y la pareja, pero una no tiene una cremallera con la que quitarse el traje de alcaldesa. Es difícil no llevarse los problemas a casa, pero tienes que llevar tu casa, duchar a tu hijo, hacer la cena y también escuchar a mi marido que también tiene sus problemas y le apetece compartirlos.
