Cada año, Celera selecciona diez jóvenes de toda España que destacan en algún campo relacionado con la innovación, el emprendimiento, la ciencia, la biomedicina o el talento. Este programa da durante tres años recursos, formación y oportunidades para desarrollar el proyecto que han presentado. Los dos ejes en los que se centra el programa es durante el primer año, tal como explican en su web, “generar un sentimiento de pertenencia y a fortalecer la inteligencia intrapersonal“, el segundo año el objetivo se centra en las habilidades interpersonales y durante el último año, se define el propósito de vida y el entrenamiento enfocado en la resiliencia.
Este año, uno de los diez seleccionados por la aceleradora de talento joven ha sido el ciudadrealeño, Enrique Ortega, inventor y arquitecto habilitado por la Universidad Politécnica de Madrid, apasionado por la innovación, el liderazgo y la naturaleza.
Ortega ha participado en programas como Factoría de Talento o Santander Explorer, ayudando a más de treinta familias a reconectar entre sí gracias a su proyecto FamilyLab. Su trayectoria académica ha sido premiada en diversas ocasiones por entidades como NOVA 111, 35under35 o Global Shappers. Actualmente trabaja en Verisure, empresa líder en el sector de la seguridad, como parte del departamento internacional de innovación, negocio y propuesta de valor.
Hace un poco más de un mes, explica Ortega a Lanza, comenzó esta lanzadera cuyo programa tiene diferentes vivenciales, en el que participa no sólo la última selección de talentos, sino todos aquellos que ya pasaron por aquí y que quieren acompañar a los nuevos.
Pese al innegable talento de los diez elegidos para esta nueva edición, el joven ciudadrealeño destaca de sus compañeros “la humildad y la calidad humana. Aquí nadie se presenta hablando de sus vidas súper interesantes, de proyectos de impacto que están ayudando a muchísima gente. Son todas personas top y gente que realmente está aportando un montón de valor, pero en Celera importa no lo que haces, sino quién eres como persona”.
Esto, precisamente, es una de las grandes diferencias con otro tipo de lanzaderas de talento. “Aquí nos sentimos muy cómodos, porque no tenemos la sensación de tener a alguien juzgando lo que hacemos, nadie va a intentar ser la persona más interesante”. “Cuando estás dentro de Celera, sabes que has pasado unos filtros, sabemos que todos hacemos muchas cosas y por eso, lo importante es lo que somos como personas, lo que aportamos al mundo, las cosas que nos mueven”.
En esa búsqueda de lo que es como persona, este talento joven de Ciudad Real, se define como “un chico de Ciudad Real que salió buscando Mundo y que tuvo que volver por la pandemia, descubriendo cuáles son los planes de futuro que me motivan desde Ciudad Real”.
Sobre sus proyectos, actualmente se encuentra trabajando en Verisure, donde invierte gran parte de sus días, pero también forma parte de la Asociación Internacional System Innovation, “donde encontramos respuestas a muchas de las inquietudes que nos rodean. Por ejemplo, yo trabajo mucho con impresoras 3D para llevar a cabo algunos inventos aplicados a mi vida diaria y si surge cualquier duda, tenemos un chat en WhatsApp donde encontramos respuestas a muchas de las preguntas que nos surgen”.
Celera nació en el año 2015 para “apoyar el talento nacional”
En 2015, Javier García, científico de reconocido prestigio internacional y preocupado por ofrecer oportunidades a jóvenes españoles con talento funda Celera para apoyar y dar recursos al mejor talento del país. Movido por su experiencia y emprendedor en el Instituto Tecnológico de Massachusetts, decide crear este programa de aceleración de talento tpara que los jóvenes más brillantes puedan hacer realidad sus proyectos en España. Para ello, invirtió parte del dinero del premio Rey Jaime I que recibió en 2014.
Fruto del encuentro de jóvenes brillantes que han pasado por el programa a lo largo de estos años, han surgido todo tipo de iniciativas, como: The Open Ventilator, proyecto que implicó la creación de un respirador aprobado y aceptado por las autoridades sanitarias españolas en los peores momentos de la pandemia de 2020.
Por esta lanzadera de talento se encuentran la reciente Premio Nacional de Innovación 2023 en la categoría Joven Talento Innovador, Natalia Rodríguez, o Ignacio Moreno, fundador de la fintech Capchase, dedicada a la financiación de otras startups con un modelo SaaS, que hasta la fecha ya ha logrado levantar más de 500 millones de dólares.
El investigador José Miguel González fue uno de los primeros talentos jóvenes de Celera
En el año 2015, primer año que se llevó a cabo esta lanzadera de talento, el investigador ciudadrealeño, José Miguel González Domínguez, fue uno de los diez jóvenes seleccionados por Celera.
Especializado en la química de nanomateriales de carbono, José Miguel trabaja en la actualidad en proyectos que tienen que ver con la energía, la salud y la conservación del patrimonio histórico, además de la divulgación científica.
Una de estas investigaciones, es la que le ha llevado desde hace años a liderar un proyecto para la aplicación de nanopartículas de carbono para el tratamiento del cáncer de colon sin que su aplicación afecte al resto de células sanas.
La investigación todavía en fase inicial, ha arrojado resultados muy positivos, consiguiendo resultado 170 veces más potentes que la quimioterapia convencional, con una dosis diez veces menor.
Un proyecto de tres años de mentorización
Enrique y Alba, dos castellanomanchegos seleccionados por Celera
Alba Rubio, nacida en Toledo y criada en Quintanar de la Orden, y Enrique Ortega, serán dos de los diez talentos jóvenes seleccionados por Celera en esta nueva edición de la lanzadera.
Alba ha sido estudiante de Grado de Biotecnología en la Universidad de Salamanca. Posee un máster en Biotecnología Microbiana en la Universidad de Leiden, realizando también un doctorado en Biotecnología Microbiana en la Universidad de Barcelona, enfocado en el estudio de nuevas estrategias para combatir enfermedades infecciosas mediante el análisis del ADN de patógenos.
Ha dedicado parte de su carrera a la divulgación científica, por medio de talleres, charlas y conferencias, llevando a pie de calle conceptos complejos de biología para hacerlos accesibles para niños y adultos, fomentando así una cultura científica inclusiva.
Esta décima generación está conformada por Jaime Oliver, José María González, Víctor Rodríguez, Teresa Gratacós, Ana de Pablos, Manuel Rico, Ana Simoneta Rubido y Tarik Ruiz. Con ellos, ya son 100 los jóvenes que han pasado por Celera desde su puesta en funcionamiento.
Alejandro Rodríguez, director de Celera destaca que esta nueva edición de la lanzadera “es una ocasión especial para celebrar todos los éxitos conseguidos, y también una oportunidad para mirar al futuro”.
De cara al futuro casi inmediato, desde Celera se fijan como objetivo “maximizar su impacto positivo llevando su metodología de identificación y desarrollo de talento a la sociedad, organizaciones y universidades”.