El centro de interpretación del aeropuerto de Ciudad Real, la impresionante infraestructura diseñada con forma de volcán (un guiño al vulcanismo del Campo de Calatrava), que llegó a estrenarse como centro de convenciones y congresos, ha sido objeto de un llamativo robo de planchas de cobre que ha afectado al revestimiento exterior.
La Policía Nacional recibió la denuncia hace quince días, e investiga la autoría, todavía sin resultado. A simple vista se aprecian los efectos del robo en fotografías captadas por los curiosos que se acercan a las instalaciones, incluidas dentro de todo el complejo aeroportuario, en el que la línea de negocio fundamental es el aparcamiento de aviones, desde que CRIA (Ciudad Real International Airport) se convirtió en propietaria en 2018 e intenta reflotar la infraestructura.
Creación de una empresa de seguridad propia
El aeropuerto ha confirmado el robo que se produce en pleno proceso de creación de una empresa de seguridad propia, tras la salida en julio por impagos de Asegura Control, la firma que se ha encargado en los últimos diez años de la vigilancia específica que requieren los aeropuertos.
Subrogarán a 4 trabajadores
Al parecer en unas semanas el aeropuerto tendrá su propia empresa de seguridad privada, a la que se van a subrogar a cuatro trabajadores de la primera, requisito para que la Agencia Estatal de Seguridad Aérea (AESA) permita de nuevo los vuelos de aviación civil.
El aeropuerto tiene personal las veinticuatro horas desde que salió la empresa de seguridad, pero no la vigilancia que exige AESA para operar con todo tipo de vuelos.