La Confederación Hidrográfica del Guadiana está buscando nuevos pozos de agua subterránea para reforzar el abastecimiento a la comarca del Campo de Montiel, dependiente del embalse de La Cabezuela, al que le queda agua para poco tiempo.
La localización de nuevas captaciones de emergencia subterránea entra dentro de las obras de emergencia que acometerá este año el Gobierno central en la zona, para paliar los efectos de la sequía. Son tres millones de euros de inversión, aprobados dentro del decreto anticrisis 8/2023 que salió adelante hace quince días en el ‘superpleno’ del Congreso de las ajustadísimas votaciones.
Declaración de emergencia
“Estamos preparando la declaración de emergencia de las obras que nos permitirán movilizar nuevos recursos subterráneos, mejorar el recurso existentes y ganar en eficiencia es las tuberías. Es la única formula, La Cabezuela tiene poco más de 1 hm³, eso es insuficiente para abastecer doce pueblos este año”, explica Samuel Moraleda, el presidente de la CHG.
Se trata de obras en colaboración con Infraestructuras del Agua de Castilla-La Mancha, en conversaciones con la Confederación para que todas las mejoras se hagan de manera conjunta. De momento la CHG ha autorizado la puesta en funcionamiento del pozo Genaro, el primer refuerzo subterráneo general con el que contarán al menos siete pueblos dependientes de La Cabezuela. Otros tienen sus propios pozos alternativos y algunos, como Castellar de Santiago, dependen del agua de otros emplazamientos porque carecen de aguas subterráneas en su término municipal.
Los detalles de estas obras de emergencia se irán dando a conocer en los próximos meses.