Las lluvias que han dejado a su paso los frentes asociados a las borrascas Hipólito, Irene y Juan han provocado la crecida de los ríos Bullaque y Guadiana en Ciudad Real, que en el caso del primero ha alcanzado este sábado su máximo nivel, mientras que el Guadiana se prevé que ocurra en las próximas horas.
Así se refleja de los datos obtenidos este sábado de la Confederación Hidrográfica del Guadiana (CHG) que indican que el río Bullaque, a su paso por los municipios de Piedrabuena y Luciana alcanzaba a las 3:30 horas de esta madrugada su caudal máximo con 174,46 metros cúbicos por segundo (m³/s) y una altura de 2,37 metros.
Tras el paso de las horas, la avenida de agua ha ido reduciéndose, hasta bajar a los 126,57 m³/s horas y una altura de 2,06 metros a las 13:00 horas de este sábado.
En el caso del río Guadiana, a su paso por Puebla de Don Rodrigo, aún no alcanzado su máximo nivel, algo que se espera que ocurra en las próximas horas.
A las 13:00 horas de este sábado el río Guadiana alcanzaba un caudal de 198,48 m³/s y una altura 2,63 metros, pudiendo llegar a superar en las próximas horas los 200 m³/s
La crecida de los ríos Bullaque y Guadiana ha dejado numerosas zonas inundadas de terreno inundadas, como en Piedrabuena, donde el agua ha cubierto gran parte de la zona destinada al uso público en la Tabla de la Yedra.
La crecida de estos ríos, como en otras ocasiones, ha vuelto a generar una gran expectación entre los ciudadrealeños, y muchos de ellos se han acercado hasta puentes y zonas seguras de sus riberas para observar el importante caudal de agua que han alcanzado.
La estampa deja a muchos curiosos inmortalizando con sus teléfonos móviles la fuerza y la bravura con la que se muestran ahora estos ríos, que hasta hace poco tiempo permanecían con un mínimo caudal de agua.
Manuel Simón, un vecino de Ciudad Real que se ha acercado hasta el Puente Nuevo en Piedrabuena, ha comentado que es realmente sorprendente ver cómo los ríos responden a la llegada de las lluvias.
Simón ha comentado que, como muchas otras personas, llevaba mucho tiempo deseando ver correr los ríos, después de tantos años viéndolos casi secos como consecuencia de la sequía.
«Estas lluvias no son una solución al problema de la sequía, pero, sin lugar a dudas nos devuelve imágenes que todos deseamos ver».
Y ha señalado que con su crecida, estos ríos «reivindican sus cauces naturales, que, en muchos casos, han sido y están ocupados de forma ilegal».
Según la Amet, el paso de los frentes asociados a las borrascas Hipólito, Irene y Juan han dejado en algunos puntos del oeste de Ciudad Real precipitaciones por encima de los 100 litros por metro cuadrado (l/m2), como es el caso de Puebla de Don Rodrigo, donde desde el lunes se acumulan ya 107,5 l/m2 de lluvias.
En el Parque Nacional de Cabañeros se llevan registrados desde el pasado lunes 78,4 l/m2.
Estas precipitaciones, que también se han extendido al resto del territorio provincial, también han provocado el aumento de una buena parte de los ríos y arroyos de la provincia.
