El comercio online, adormecido en el caso de las floristerías de Ciudad Real desde que empezó el confinamiento, ha permitido celebrar con flores este atípico Día de la Madre. La clientela fija ha recurrido a su tienda de confianza para tener un detalle con madres o abuelas a las que, en muchos casos, no han podido visitar.
“No hemos tenido la actividad que otros años, pero algo es algo”, explica Carmen Rivas, dueña de Ikebana, cerrada como todas desde que empezó el confinamiento pero preparada para el comercio online y el reparto a domicilio. Aunque el día -uno de los de más negocio del año en circunstancias normales- ha sido “flojito” esta vez, “nos hemos quedado sin flores”, afirma.
Entregas escalonadas
Tantos pedidos han hecho que Pife, floristería de la calle Calatrava, empezara el reparto ayer sábado y lo ha escalonado para no acumular las entregas en el mismo horario. En La Orquídea la mañana ha sido un no parar, “tenemos la tienda cerrada al público, pero estamos en el vivero montando los ramos y centros. Aunque estemos en esta situación que las madres no se queden sin flores, hemos servido sobre encargo y a nuestros clientes fijos”.
El Jardín Romántico, “a tope” de pedidos
La venta online ha permitido a El Jardín Romántico, otra floristería de Ciudad Real, servir ramos a domicilio. “Hemos recibido los pedidos de forma online y le hemos dado prioridad al reparto por orden de entrada”, explica uno de los empleados.
El confinamiento ha afectado a los canales de distribución, “no todas las empresas suministran como antes, las flores han estado llegando por paquetería, en vez de puerta a puerta, aunque esto último se empieza a recuperar”.
Como el resto de comercios las floristerías se preparan para el momento que se les permita abrir al público, aunque tengan que cambiar las normas de higiene.
Detalles por el Día de la Madre en la calle
Los detalles por el Día de la Madre, en el fin de semana del inicio de la “desescalada” de las duras medidas de movilidad impuestas en el decreto de estado de alarma, se han notado en los paseos matutinos y vespertinos de este domingo.
No todo el mundo ha recurrido a las floristerías para celebrar el Día de la Madre, una vecina de un piso de la calle Calatrava, la única que tiene patio, lo ha decorado con flores y un cartel en homenaje a las madres de todo el bloque.