Más de un millar de jóvenes se han reunido en la Concha de la Música para apoyar un proyecto de Manos Unidas en Belén donde, a través de la solidaridad de estos escolares, podrán mejorar la capacidad educativa de chicos con discapacidad auditiva. Es un proyecto que comenzó en el año 1971 que también lleva Patriarcado de Jerusalén, explicaba Pedro Antonio Rodríguez, párroco de la Parroquia de San José.
La recaudación continuará a lo largo de esta campaña que se desarrolla en estas semanas en todo el arciprestazgo de Puertollano y esperan que sean unos 40.000 euros los recaudados, que es en lo que está presupuestado este proyecto.
Los colegios María Inmaculada, San José y San Juan Bosco han colaborado y participado en esta iniciativa que ha finalizado comiendo un bocadillo solidario.
El alcalde de Puertollano, Miguel Ángel Ruiz, asistía a este acto destacando que «hoy nos unimos todos, unimos nuestras voces, nuestro corazón, con un compromiso único que es seguir luchando porque no haya hambre en el mundo, no haya desigualdad, por la justicia y por la inclusión, el dinero que se recaude en esta campaña es para ayudar a educar a los niños con discapacidad auditiva en la ciudad de Belén, en Palestina, que todos sabemos que están pasando por unos momentos muy difíciles».
Ruiz aseguró que este gesto, de estos mil jóvenes de Puertollano, representa «la esperanza y el compromiso de toda una sociedad para mejorar la situación del mundo, pequeños gestos hacen que la vida pueda cambiar».
